Ante el Real Sporting, el Real Valladolid volvió a sufrir un gol en contra en los primeros diez minutos del partido

Como el estribillo de una canción que se te pega, el Real Valladolid volvio a encajar un gol en los primeros minutos del partido, en la primera llegada del Real Sporting de Gijón al área de Jordi Masip y otra vez desde la banda izquierda, la zona que se está convirtiendo en el mayor de los problemas de conjunto blanquivioleta en los últimos partidos porque es por donde están llegando los tantos de los rivales, que se han encontrado con un filón esté Nacho, como en El Molinón, o esté Ángel, como en los encuentros anteriores.
Apenas corría el minuto cinco de partido cuando Bergantiños servía un balón profundo para Calavera, centraba sin nadie delante para ponerle un balón preciso a la cabeza de Stefan que batió a Masip para adelantar a los rojiblancos en su casa. Nada nuevo sobre el horizonte para los pucelanos que en cinco de los últimos seis partidos ha encajado gol antes del minuto diez. En la derrota ante el Rayo, en el minuto ocho; ante el Almería, en el dos; frente al Lugo recibió gol en el diez y contra el Nàstic, en el ocho.
«Tenemos que erradicar el empezar perdiendo», comentó tras el encuentro Luis César Sampedro, y es que verse por debajo en el marcador tan pronto obliga a cambiar el esquema de juego con el que salía el equipo. Si el Real Valladolid es capaz de marcar e incluso adelantarse en el marcador, todo cambia, se transforma y pasa de ser un equipo con posesión y poca profundidad a encerrar al oponente y asediar la meta rival.
Tan solo un gol es capaz de hacer eso, pero si encajas gol en la primera llegada de peligro se hace muy complicado que este equipo sea capaz de ganar el partido y es que en esta segunda division si no eres capaza de imponeter defensivamente es francamente difícil lograr el ascenso a final de temporada.
Lo que parece claro es que cuando este Real Valladolid sea capaz de asentarse en la parcela defensiva, su proyeción ofensiva será mucho mayor y eso en este equipo se traduce en goles, buen juego y que la afición disfrute viendo a los futbolistas blanquivioletas que están pasando por un bache del que tienen que salir cuanto antes. El primer paso estuve en conseguir igualar el partido en Gijón, ahora queda refrendar eso consiguiendo un triunfo ante el Oviedo, a poder sin encajar gol en contra.
Otra opción que debería barajarse es un cambio en el sistema, aunque conociendo a Sampedro esto no parece que vaya a ocurrir porque es un entrenador de convicciones fuertes, que tiene claro el estilo con el que quiere que juegue su equipo y va con ello hasta las últimas consecuencias. En ese caso una de las soluciones debe estar en corregir las subidas de los laterales en ataque, determinar en qué momentos deben hacerlo para no descuidar su verdadera tarea, que no es otra que la defender.