El Promesas luchará por el triunfo en el campo de Fabril con la baja de Dani Vega, por lesión, y las de Cobo, Bruno, Montenegro y Sinisterra, por descarte

Sumar de tres se hace de rogar para el Real Valladolid Promesas. Tras haber estado cerca en varias ocasiones –la más clara, la semana pasada ante el Rápido de Bouzas–, el equipo de Miguel Rivera quiere aprovechar la oportunidad de medirse a otro filial y conseguir el triunfo que marque el camino hacia la mejora y elimine la presión de victoria a los futbolistas.
Los precedentes al encuentro no invitan al optimismo. Los partidos que ha disputado el conjunto blanquivioleta ante otros filiales se han saldado con sendas derrotas –Atlético de Madrid y Celta de Vigo– y, para colmo, el Fabril comenzó de forma contundente la competición. El Deportivo B es el líder del Grupo I con cinco victorias y tan solo un empate y una derrota. El domingo, a partir de las 17:00 horas, habrá oportunidad de medir el ‘efecto Rivera’ en tierras gallegas ante un rival exigente.
Con Miguel Rivera, las sensaciones en Ponferrada fueron positivas por parte del Promesas y ciertamente, ante el Rápido de Bouzas, mereció más que el empate que encajó el conjunto blanquivioleta en los compases finales. Con el nuevo entrenador, el equipo ha ganado en solidez y en generosidad. Tan solo falta la victoria que refrende el nuevo método de trabajo.
Para la cita, el técnico dejó fuera de la convocatoria a Cobo, Bruno, Montenegro y Sinisterra por decisión técnica. Dani Vega, con molestias musculares, es el único futbolista que es baja obligada, mientras que Aparicio y Pablito disputaron competición con el Juvenil. La lista de dieciocho queda formada por: Tanis, Guille, Raúl Navarro, Rubén, Mario, Velásquez, Porto, Corral, Carrascal, Alvarado, Mari, Mayoral, Javi Pérez, Mito, Miguel, Samanes, Luis Suárez y Becerra.
Por su parte, el filial del Deportivo de la Coruña afronta el partido con la tranquilidad de haber logrado cuatro victorias consecutivas en las últimas jornadas. En el año del regreso a la categoría de bronce, el Fabril ha conseguido un colchón más que importante para poder afrontar la competición sin agobios, ni presiones desmedidas por sumar como las que puede estar sufriendo el Promesas en estos momentos.
El cuadro blanquiazul no es un filial joven, por norma general, puesto que la edad media del bloque supera los veintidós años. Jugadores como Uxío o Romay, con 27 años cada uno, son la prueba de que el objetivo del Fabril pasa por asentarse en la categoría de bronce para que puedan seguir progresando futuros talentos blanquiazules.
En el cuadro gallego destaca la presencia del salmantino Diego Caballo, formado en la base de la extinta UD Salamanca. Caballo pasó por la cantera del Real Madrid y del Valencia hasta desembocar en tierras gallegas. El jugador charro además vivió una situación anecdótica al llegar a entrenar con la selección nacional absoluta cuando se encontraba en una convocatoria de selecciones inferiores de la Roja.
Otros nombres a tener en cuenta del Fabril son el de ‘Bicho’, que tras su paso por el Barça B, Leganés y Racing de Ferrol, vuelve a casa para ganarse un sitio en el Deportivo y el delantero Borja Galán. Galán llegó la temporada pasada a Coruña para marcar los goles que pudieran ayudar al ascenso y volver a jugar en una categoría, 2ªB, que conoce bien por su paso por los filiales del Atlético de Madrid y el Getafe.