El entrenador del Real Valladolid vivió una tarde de nervios en el Juan Carlos Navarro, pese a la victoria ante el Leganés. Esta es la vídeo historia del teniente de Arosa
Hay quienes, osados ellos, piensan que los partidos de pretemporada son un camino de rosas. Encuentros que a la postre no significan ningún resultado práctico, en los que no hay nada en juego. Pues bien, esos partidos no existen para Luis César Sampedro. El entrenador del Real Valladolid se dejó el sudor, los músculos y la voz para al menos un par de días durante el transcurso del choque que enfrentó a su equipo con el Leganés el Rioseco.
Y es que el Teniente de Arosa no entiende de amistosos. La premisa para sus jugadores era clara; ganar, ganar y ganar, con un marcado carácter de presión e intensidad que al final quedó reflejado sobre el césped. Eso sí, al menos el entrenador se fue contento para casa después de lo que fue su sexto encuentro como entrenador blanquivioleta sin derrota. ¿No lo creen? Denle al play.
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