André Leão se encuentra en un bajo momento de forma, al igual que su equipo

André Leão, ‘El León de Freamunde’, lleva siendo el faro del Real Valladolid en las últimas tres temporadas. Mejor o peor, siempre que está al 100% es titular para cualquiera de los entrenadores que he tenido a lo largo de su estancia en la capital vallisoletana.
Su rendimiento en las primeras fases de las distintas temporadas ha sido siempre notable, pero conforme avanzaba el curso, se venía abajo. Sin embargo, un cierto repunte de sus prestaciones, a veces coincidente con el del equipo en general, hacía que terminara cada curso siendo uno de los jugadores con más minutos e importancia.
Sin embargo, este curso el bajón se está prolongando y empieza a ser señalado por muchos como uno de los problemas del equipo. Parece descabellado hablar así de alguien que jamás ha sumado sobresalientes ni estrépitos, pero su partido frente al Real Zaragoza del pasado domingo fue uno de sus peores encuentros, si no el peor, desde que arribara las orillas del Pisuerga.
Corría el minuto 53 de encuentro en La Romareda cuando el luso era sustituido por Álex Pérez. La razón esta vez no era un problema físico, sino la más que probable expulsión del mediocentro. Nada extraño si habláramos de otro tipo de jugador que se desenvuelve en esa posición tan delicada, pero de quien hablamos es de André Leão, un jugador que en los 94 partidos de liga anteriores con el Real Valladolid solo había sido expulsado en un encuentro frente al Sabadell en de la temporada 2014/15.
Frente al Zaragoza, Paco Herrera dejó de apostar por los tres centrales, que hasta el momento había sido una de las explicaciones del bajo rendimiento últimamente de André Leão. Es innegable que la presencia de Guitián sacando la bola desde atrás como central más acorde para desempeñar ese trabajo suprimía, casi por completo, una de las funciones que el luso desempeñaba como cabecero.
Sin embargo, no todo podía achacarse a eso o, al menos, eso mismo podía servir de excusa. Nada más lejos de la realidad: frente al conjunto maño estuvo a punto de ser expulsado por la reiteración de faltas. Leão llegaba tarde a cada disputa, pero también a cada acción, tanto en fase defensiva como ofensiva. En esta última, ni apareció, como el resto de un centro del campo, que no recuperó ni guardó la pelota, llegando el contrario a sumar más de un 70% de posesión del balón.
Todo esto, cuando se supone que por jugadores, esquema (rombo) y estilo, debía ser el Real Valladolid el que dominara en este apartado del juego. Quedaba en evidencia tras su sustitución, que Leão no está como debe ni como acostumbra, pese a que el nivel de esto último es sensiblemente menor que lo que de él aquí se esperaba, sobre todo en el apartado ofensivo.
Los leones con la melena más corta o que no cuentan con ella son los menos fértiles. La testosterona, la hormona que hace que esto último ocurra, es también la encargada de hacer que el rey de la sabana luzca una melena fuerte, poblada y majestuosa. Parece ser que, últimamente, André Leão se rasura más que de costumbre, sin haberle visto nunca con barba.