La última vez que el Pucela perdió por cuatro goles de diferencia en casa y en Segunda División fue hace 74 años
Hay resultados que hacen daño. Hay resultados que son muy negativos. Hay resultados históricos que hacen mucho daño y que son tremendamente negativos. El cero a cuatro que endosó el Levante al Real Valladolid es uno de estos.
Foto: Raquel Gómez
Es una goleada histórica porque el Real Valladolid no perdía por cuatro goles en su feudo desde el doce de diciembre de 1943, es decir hace 74 años, tal y como señaló en Twitter Alexis Martín Tamayo, el especialista en datos de Onda Cero. Aquel día el Pucela, que jugaba en el Antiguo Estadio José Zorrilla, situado junto a la Plaza de Toros, perdía por un amplio 1-5 frente al Sporting de Gijón.
Una goleada histórica, la del Levante, que llega en el peor momento posible, después de perder en Huesca, y que se convierte en la segunda derrota consecutiva y el tercer partido seguido sin sumar tres puntos hace que el Pucela se aleje de los puestos de play-off, al menos cuatro puntos.
Todo eso se une al daño que va a suponer este 0-4 en el club blanquivioleta. Con un equipo cuestionado por su pobre rendimiento, este resultado va a traer consigo una semana movidita en la que será obligatorio discutir cual va a ser el futuro del Pucela en lo que queda de temporada; seguir buscando los puestos de promoción casi como quien busca una utopía o apostar por gente joven, de la casa y con futuro de cara al próximo año.
En el mismo sentido cabe mencionar la situación de Herrera, del que muchos aficionados ya piden la cabeza. Si hace apenas un mes se hablaba de su posible renovación, a día de hoy está más lejos que nunca. No obstante, Carlos Suárez dejó claro en rueda de prensa que no pasa por su cabeza la marcha del entrenador, en quien confía y tiene puestas sus esperanzas en un proyecto a largo plazo.
Muy negativa esta derrota por el resultado, las sensaciones y la distancia con el objetivo. Y no solo eso, es la sensación de que el equipo no puede más, otra vez. El síntoma más claro de haber llegado al límite está en el propio Paco Herrera. El entrenador se pasó toda la segunda parte sin salir de su banquillo dejando a su segundo, Ángel Rodríguez, dar las instrucciones sobre el verde. El equipo no respondía y su entrenador no lo intentaba.
El Levante, que no había conseguido ganar nunca en Zorrilla lo hizo este sábado once de marzo de 2017 con una victoria que entra de lleno y por derecho propio en la historia negra del Real Valladolid.