El técnico del Real Valladolid valoró la derrota de los suyos ante la SD Huesca, un conjunto que «apretó mejor» que los blanquivioletas

Paco Herrera, entrenador del Real Valladolid, compareció ante los medios de comunicación tras la derrota de sus pupilos por 1-0 ante el Huesca en el Alcoraz. El pacense considera que la presión fue la clave que hizo que la balanza se decantara del lado local. «Ellos han apretado mejor, y así nosotros nos hemos equivocado más. En la primera parte tuvimos soluciones y siempre encontramos un pase, pero en la segunda no ha sido así», reconoció el técnico.
Fruto de esa presión, los blanquivioletas se mostraron planos y fallones a la hora de combinar; un aspecto que disgustó de manera especial a Herrera. «Nosotros los pases los hemos dado de mentira. Hemos tenido pases de tres metros que lo único que hacen es facilitar las posibilidades de robo. No conseguíamos salir limpios de las jugadas», apuntó.
Aunque la dejadez fue la tónica dominante en el juego del Real Valladolid, esta se notó especialmente tras el descanso. Una circunstancia en la que el técnico también hizo hincapié. «En la primera parte hemos estado concentrados, lo hemos hecho bien y no ha habido posibilidades de contra. Después se nos ha olvidado que cada vez que perdemos un balón hay una contra. Son situaciones de fútbol que un equipo hecho tiene que controlar, y no las hemos controlado«, subrayó Herrera.
Paulatinamente, el Huesca se fue encontrando más cómodo sobre el césped y desplegando sus armas a base de contragolpes. Una piedra que el Pucela parecía tener apartada del camino pero con la que ha vuelto a tropezar por enésima vez. «Es más fácil jugar a defender y después atacar que querer llevar el peso del partido, y eso el Huesca lo hace muy bien. Nosotros estamos dejando de hacer bien lo que hacíamos bien. Antes, aunque nos apretaran, teníamos soluciones«, lamentó el pacense.
Sin citar nombres propios, Herrera admitió que ve a algunos de sus hombres más cansados de lo normal, aunque optó por no darle mayor importancia. «Estamos entrando en un estilo de juego que no es el que yo quiero que sea. Hay uno o dos jugadores determinantes en el posicionamiento sobre el campo que no están al 100%, como si hubieran pegado un bajón, aunque eso nos pasa a todos», tranquilizó. Sea como fuere, los viejos fantasmas vuelven a cruzarse en el camino del Real Valladolid, que ve como el billete del play-off se vuelve cada vez más caro.