Un gol del Cristo Atlético justo antes del descanso y otro nada más comenzar la segunda parte dejaron sin premio a los rojiblancos

El día de los ‘Atlético’ tuvo su protagonismo en La Nueva Balastera. Con el Athletic Club – Atlético de Madrid disputándose en Bilbao, tres cuartos de hora más tarde comenzó en Palencia el Cristo – Tordesillas. El frío no contagió a los jugadores de ambos conjuntos, que se mostraron activos durante todo el encuentro y siempre buscaron la portería rival.
A uno le salieron las cosas y al otro no. Ganó el favorito, el que sabía que si vencía terminaba la jornada como colíder y al que le fue mejor. El Cristo aprovechó dos fallos en defensa de los vallisoletanos para asestar sendos duros golpes.
Porque el Torde mordió primero, pero sin efecto. Mato movió a los de Turiel en ataque y vio huecos claros para arañar a un rival ayudado por el Cristo –nunca mejor dicho–. Lerma envió alto un buen balón al espacio de su compañero, que adquirió todo el protagonismo poco después. El latigazo pegó en el larguero y botó en el césped, muy cerca de la línea, pero fuera de la meta.
Pasado el primer cuarto de hora, el Cristo comenzó a llegar al área visitante. Tuvo más el balón, pero metió menos miedo. Sí que dispuso de dos ocasiones en las que rozó el gol. Pero los minutos pasaron y ese dominio no se transformó en peligro.
Mientras, el Torde, bien plantado, siguió a lo suyo. Mato apareció para gozar de dos oportunidades y en ambas finalizó mal. La más clara fue la segunda, en una buena combinación con Lerma, quien le devolvió la pared y el vallisoletano chutó muy desviado con la diestra –la menos buena–.
Caros errores
Al final, perdonó y, como suele ocurrir, lo pagó. El Cristo mandó un balón en largo para la carrera de Aitor, Sergio –quien poco antes sacó un buen disparo del mismo rival– salió mal, el local la pinchó con maestría y solo tuvo que dar un pase a la red, ya que no hubo oposición. Fue en el minuto 45, cuando más duele, justo antes del descanso.
El efecto psicológico no se notó demasiado tras el paso por vestuarios, puesto que el Torde salió en busca del empate. Pero no le sirvió de nada porque el conjunto palentino asestó el golpe definitivo. Alan aprovechó otro fallo de la defensa, se zafó como pudo de su rival en la línea de fondo y pasó atrás para que Blanco fusilara a Sergio.
Tuvo tiempo de sobra el equipo de Turiel para hacer algo; concretamente, 35 minutos. Pero no lo consiguió, aunque la toalla siempre estuvo arriba. La entrada de Adalia aportó un plus a los visitantes, que rozaron el gol en varias ocasiones. También pudo ampliar la ventaja el Cristo, pero Sergio y la mala puntería palentina dejaron el dos en el marcador local.
Tampoco se movió el de los rojiblancos, pese a los intentos. El esfuerzo no valió ni un punto ante el segundo clasificado y complica un poco más a un Tordesillas que se queda a tres unidades del descenso. El próximo domingo, a partir de las 16:30 horas, recibe a otro Atlético, el Bembibre, que sí es de su ‘Liga’.