El mediocentro vallisoletano abandona la disciplina del conjunto de la Villa del Tratado por un club al que se especuló que iría en verano

Tal y como si de un virus invernal se tratara, el Atlético Tordesillas continúa con su proceso de descomposición. Si primero anunció el abandono de la práctica del fútbol de Gustavo Terleira, por mor de unas jaquecas crónicas graves, y más tarde Tiri y Oli decidieron cambiar de aires ante la falta de minutos, este viernes se confirmó la cuarta baja de este duro invierno, Alberto Rodríguez, con dirección a Unionistas de Salamanca.
El mediocentro vallisoletano, que recaló en la Villa del Tratado la pasada temporada, recala así en un club al que se especuló que iría el pasado verano. Finalmente no se concretó ninguna oferta, ni de la entidad salmantina ni de otra que le permitiera dar un paso adelante en su carrera, por lo que siguió a las órdenes de un Jesús Ángel Turiel para el cual era un pilar básico en el centro del campo.
Aunque el Atlético Tordesillas le ha facilitado la salida, hecho que el propio jugador ha agradecido en sus redes sociales, supone una baja sensible, toda vez que había jugado los veinte partidos disputados hasta la fecha, con un total de 1.568 minutos, nada menos que el 87’1%, lo que hace que quepa esperar que uno de los fichajes que están por llegar al equipo rojiblanco sea para paliar su marcha.
Forjado en las categorías inferiores del Real Valladolid, ‘Peli’, hijo del mítico Juan Carlos Rodríguez ‘El Galgo’, llevaba esperando tiempo encontrar una oferta que le permitiera engancharse, sino al fútbol profesional, sí al menos a uno próximo. Lo hará –o esa será su pretensión– en un equipo que, aunque recién ascendido a Tercera, planea llegar a cotas altas, empezando por la promoción de ascenso a la Segunda División B. Actualmente es cuarto con 36 puntos, cuatro más que el Zamora.