El Racing de Santander consiguió remontar en los últimos diez minutos de partido el tanto de Mayoral

Tanto remar para morir ahogado en la orilla. El Real Valladolid Promesas encajó una derrota dolorosa por todos los condicionantes que la propiciaron. Los pupilos de Rubén Albés estuvieron dominando el marcador del encuentro hasta el minuto ochenta de partido en el que Dani Aquino se echó el equipo a la espalda y consiguió darle la vuelta al mismo.
El guion de la película estaba predefinido desde el comienzo. El Racing dominaría la posesión del esférico mientras que el Promesas no tendría paciencia por intentar controlar el balón y podía encontrar espacios para salir fuerte al contragolpe. De esta manera, en los primeros minutos no hubo intercambio de golpes. Algo que comenzó a suceder con un disparo de César Díaz al palo cerca del minuto veinte de partido.
Por su parte, antes del tanto de Mayoral, el Real Valladolid B lo intentaba tímidamente con un disparo de Vega. Pero tuvo que ser el salmantino el encargado de batir a Iván Crespo. Tras un centro pasado de Royo, el balón cayó al área, donde esperaba Mayoral para darle ventaja a los blanquivioletas. Con este gol, y una hora de por delante, comenzaban los sufrimientos en las carnes blanquivioletas.
Los intentos de empate del Racing no se hicieron esperar. Un disparo de falta teledirigido a la escuadra obligó a Dani Hernández a sacar una mano providencial. Eso solo fue el comienzo. Lo peor llegaría tras la reanudación, aunque el arreón del Racing se hizo esperar hasta el tramo final del encuentro.
Antes, infortunios en forma de lesiones. Óscar Arroyo se rompió e intentó aguantar hasta que no pudo más y entró el juvenil Juan en su lugar. Un jugador que había disputado los noventa minutos en la victoria del Juvenil DH ante el Real Madrid y que salía al campo para no actuar en su posición natural –extremo– sino como lateral derecho, posición en la que podía haber debutado Corral. Además, Miguel Marí también abandonó el campo con molestias.
Con todo ello, llegó un vendaval verdiblanco que tenía nombres y apellidos: Dani Aquino. El que fuera jugador del Real Valladolid no tuvo piedad de su antiguo club y celebró con rabia el gol del empate, cuando consiguió superar a la defensa y a Dani Hernández, tras cuatro rechaces en la misma jugada.
Sería la premonición del desenlace final. Aquino tenía hambre y celebró con rabia el tanto con su afición. Esta se creció con su delantero, le empujó a anotar y él lo volvió hacer. De hecho, en dos ocasiones. La primera, invalidada por fuera de juego, y la segunda, esta sí, que finalmente dio la victoria a su equipo.
Aquino remató el centro desde la banda derecha de Óscar Fernández para dar la vuelta al encuentro cuando el tiempo reglamentario finalizaba. Jarro de agua fría y cinco minutos de descuento para intentar conseguir un empate sin éxito. Máxime cuando Mario Gómez había entrado en la jugada precedente al segundo gol del Racing.
Pitido final y decepción blanquivioleta. Los jugadores del Real Valladolid Promesas se quedaron con la miel en los labios tras un gran trabajo a nivel defensivo aunque, a los puntos, el Real Racing Club fue merecedor de llevarse la victoria, que le mantiene como líder. Los vallisoletanos están en la decimocuarta plaza, con ocho puntos, uno más que el play-out y que el descenso.
Real Racing Club: Iván Crespo; Miguel Gándara, Samuel, Mikel Santamaría, Sergio Camus (Leonel Bontempo, min. 55); Héber Pena (Óscar Fernández, min. 76), Borja Granero, Álvaro Peña, César Díaz; Dani Aquino y Caye Quintana (Coulibaly, min. 55).
Real Valladolid Promesas: Dani; Arroyo (Juan, min. 65), Calero, Mario, Royo; Vega, Rai, Anuar, Mayoral; Marí (Iván Martín, min. 68) e Higinio (Mario Gómez, min. 88).
Goles: 0-1, min. 33: Mayoral. 1-1, min. 80: Dani Aquino. 2-1, min. 90+: Dani Aquino.
Árbitro: Espasandín Cores, auxiliado por Fente Pena y Rodríguez Campos (Comité Gallego). Amonestó a Sergio Camus, Dani Aquino, Leonel Bontempo y Borja Granero por parte del Racing y a Dani Hernández por parte de los blanquivioletas.
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada del Grupo I de la Segunda División B, celebrado en los Campos de Sport de El Sardinero ante 6.733 espectadores.