El técnico naranja se mostró disconforme con el juego mostrado por el CD Parquesol en ese periodo, después de finalizar el primero a un buen nivel. Pese al resultado, quería unas «mejores sensaciones»

Foto: Jesús Domínguez
Cuando uno gana cuatro a cero normalmente sonríe. Siendo resultadista, da por bueno el partido y no va más allá. Por norma. Hay también quien disocia marcador de sensaciones y si algo no ha ido bien se queda disconforme con ello. También es verdad que puede parecer raro lograr ese triunfo y que no todo vaya como es debido. Pero pasa.
Óscar González, entrenador del CD Parquesol, terminó el partido de su equipo visiblemente contrariado debido a la segunda mitad, a todas luces pobre. Sobró, y no debió. Pareció el conjunto naranja contagiarse de la pobreza de su rival, y eso preocupa a su técnico. «Nuestra seña de identidad tiene que ser nuestra actitud, nuestro modelo de juego. Tenemos que aprender a no caer en el error de no pensar en nosotros», dijo.
Y eso, en esos segundos 45 minutos, no pasó. Las parquesolinas se dejaron llevar, fruto del buen resultado cosechado en la primera mitad y tras verse superiores a un Guadamur que inquietó muy poco. «El descanso nos ha matado. La segunda parte ha sido muy muy floja. Nos tenemos que fijar en bastantes cosas que hemos hecho en este partido para no repetirlas, porque te sucede en una primera mitad ante un equipo que te ofrezca más y seguro que obtienes un resultado bastante más negativo», incidió González.
El técnico se sabe «inconformista», pero se ve con razones para serlo. «Podemos dar más como equipo. No estamos ni al cincuenta por cien; no acabamos de alcanzar una gran nota dentro del potencial verdadero que tenemos. La primera parte lo hicimos bastante bien. La segunda nada nada bien», reiteró, cariacontecido.
El mosqueo de Óscar González no guarda relación con el marcador o con un objetivo clasificatorio, sino con las «sensaciones» que cree que deben mostrar. «Cuando hablo de que el equipo no está al cien por cien es en el sentido de juego, cabeza, corazón, no clasificatorio; eso nos da igual. Nos da igual quién sea el rival, lo que queremos son sensaciones, que el equipo dé más», aseveró, para descartar ese resultadismo.
Dentro de una semana volverán a afrontar un partido ante un rival a priori de la zona baja de la tabla, aunque el entrenador del Parquesol no quiere pensar a una semana vista. «Sabemos que el Rayo Vallecano B va a ofrecer mucho más que este rival. Veremos cómo se prepara el partido, cómo va la semana. Las sensaciones de cara a ese encuentro se irán palpando. Pero antes prefiero centrarme en los errores cometidos contra el Guadamur«, concluyó el técnico.