El presidente mostró en zona mixta su plena confianza en el entrenador blanquivioleta a pesar de haber cosechado la cuarta derrota consecutiva
Carlos Suárez compareció en zona mixta preocupado tras la dolorosa derrota en Zorrilla, pero quiso transmitir un mensaje de serenidad a la resignada parroquia pucelana. «Habrá que trabajar. Es un equipo completamente diferente, hecho más a medio plazo. Nuestro planteamiento es que el equipo vaya conjuntándose», afirmó.
Aprovechó el máximo mandatario para confirmar su ciega confianza en que Paco Herrera sea capaz de sacar la situación adelante. «Será trabajo de Paco, que creo que lo está haciendo bien. Hay que olvidar el partido de este sábado porque creo que en otros, el equipo ha dejado buenas sensaciones. Hoy no creo que hayamos sido nosotros. Creo que Paco lo cambiará y que el equipo volverá a la senda de jugar bien», analizó el presidente.
A pesar del mensaje de calma, Suárez se mostró crítico con el partido realizado por el equipo. «No hemos jugado bien, ha salido un partido malo. Cuando nos hemos puesto por delante, he visto un poco de relajación o de exceso de confianza y al final todos esos errores se pagan en esta categoría», reconoció.
Sin embargo, y a pesar del mal partido, el dirigente no consideró que «la propuesta futbolística del Huesca» haya merecido la victoria. «Esto es fútbol. Habrá que trabajar y seguir conjuntándose. Esto es muy largo, pero la verdad es que la dinámica no es buena. Hay que darlo la vuelta ya. Cuatro derrotas son muchas, aunque estemos al principio«, afirmó tajante y contradiciéndose de la calma de la que hacía alarde segundos antes.
No quiso escudarse en el arbitraje en esta ocasión y admitió el principal culpable es el propio equipo. «Es cierto que hemos tenido dos partidos de errores que han podido cambiar el signo del partido, pero teníamos un partido para haber sentenciado y hemos sido nosotros los que hemos bajado el ritmo. No creo que haya tenido mucha incidencia en el resultado. No debemos pagar la impotencia con los más débiles (en referencia al trío arbitral). El tumulto que ha habido en el túnel de vestuarios no me ha gustado. El Real Valladolid debe mantener una imagen, independientemente de cuál sea el resultado«, señaló Suárez.
Pero no todo fue negativo para el presidente, que quiso hacer un guiño a la afición. «La gente ha estado de diez animando hasta el final», concluyó el máximo mandatario.