El técnico del Real Valladolid compareció tras el último amistoso celebrado en el stage de pretemporada, que ganó por uno a dos ante el Paços de Ferreira
Llegó el final de la segunda parte de esta pretemporada. Después de diez días, el Real Valladolid hace las maletas y regresa a tierras castellanas con mucho trabajo, pero sobre todo, sensaciones positivas por lo visto en los entrenamientos y en los amistosos.
Ante el Paços de Ferreira, el equipo blanquivioleta puso el broche con un triunfo, pero lo que es más importante, con satisfacción. O al menos así lo expresa Paco Herrera en la rueda de prensa posterior. «Me quedo con los primeros veinte minutos de la segunda parte porque hemos tenido la pelota todo el rato nosotros, algo que en la primera parte, aun haciéndolo muy bien, nos costó», analizó en primera instancia.
Los días en Portugal le han ayudado para ir definiendo un once inicial de cara al primer partido de Liga, aunque reconoce tener «problemas positivos» en algunas posiciones, ya que «dos jugadores tendrán una lucha fantástica por un solo puesto». «Yo puedo tener claro que Lucho tiene que ser el lateral izquierdo, pero es que Ángel también puede ser el lateral izquierdo», reconoció.
La parcela defensiva la puede tener más o menos clara, pero del centro del campo «puede faltar algo». Ese algo, para Paco Herrera, es «encontrarse más». Pese a eso, el técnico blanquivioleta lo tiene claro: «Vamos a llegar a tiempo para competir sin que yo pueda presentar ni una sola queja, ni una sola excusa. Este equipo está para competir y para ganar«.
El gol en contra no ha hecho que la percepción del partido cambie, lo mismo que el tanto de Jaime Mata en el 89′. «Es una anécdota el penalti que hemos cometido. Estoy muy contento con la primera parte, a pesar de que nos ha costado salir de su presión, teníamos un desfase que hemos arreglado con Sergio. Ha facilitado que Joan y Álex tuvieran más la posesión», explicó.
Quien tuvo la oportunidad de debutar con la blanquivioleta es Lichnovsky, quien llegó el martes por la noche a la concentración. Sobre él, Paco Herrera fue sincero: «No está al cien por cien, está al cincuenta o sesenta. Los jugadores en su situación han entrenado menos y han llegado tarde».
Para llevar veinticuatro horas con sus compañeros, el catalán lo ha visto «bien e integrado», algo que le podía preocupar. A pesar de su físico en estos momentos, el míster confía mucho en lo que puede dar al equipo. «Creo que nos va a ayudar mucho porque la parte de atrás y el centro del campo para mí es de enmarcar para una Segunda División«, dijo orgulloso.
Con la llegada de Lichnovsky, la defensa está completa, aunque falta por saber hasta qué punto Álex Pérez estará con el primer equipo como cuarto central o, por el contrario, abandonará la disciplina blanquivioleta (cabe recordar que está a prueba). «Mi informe es positivo. Con él y Lichnovsky tenemos un fútbol diferente al que nos da Rafa y Guitián, sobre todo para partidos que exijan más», dijo. «La guinda que podemos poner es hacia arriba y nada más», comentó en referencia a la posible incorporación de un delantero cuando salga Rennella.
Otros jugadores del filial como son Calero y Mario Gómez este miércoles no han tenido la suerte de poder ponerse la blanquivioleta. Su situación también se sabrá en breve, ya que es muy posible que estos días se sepa ya que el grupo se va a reducir. «Muchos van a ir alternando, pero cuatro se quedan con nosotros porque se lo merecen y tengo mucha confianza en ellos», aclaró sobre el futuro de los canteranos. De esos dos futbolistas, aseguró estar «encantado» y de Calero además confirmó que «puede ser muy buen central de futuro».
