Luis Miguel Sánchez Benítez, «Luismi», ha sido presentado este viernes como nuevo jugador del Real Valladolid para las dos próximas temporadas -ha firmado hasta el treinta de junio de 2018

Como suele ser habitual, Braulio Vázquez ejerció de maestro de ceremonias en la puesta de largo de su penúltimo fichaje, Luismi, a quien describió como un jugador «muy muy físico y con unas facultades tremendas», cuya «polivalencia» –se desenvuelve tanto de pivote como de central– viene «fenomenal para el nuevo proyecto».
También destacó que es un jugador «con hambre y que está en crecimiento», y confía en que esa progresión ayude al club «a conseguir los objetivos». El director deportivo dio paso a Luismi, que en sus primeras palabras admitió tener ese «hambre» que mencionaba Braulio. «Llevo tiempo sin competir, sin jugar y uno lo echa bastante de menos», comentó.
El mediocentro, que reconoció que contaba con otras propuestas, considera que está «en el lugar adecuado», ya que se trata de «un gran club». También señaló que lo que le hizo finalmente decantarse fue «la llamada del míster –Paco Herrera– y Braulio», ya que quería un club que creyera en él, que le valoraran y que le dieran «mucha confianza». Además, dijo que confía en que ambos «montarán un gran proyecto».
El gaditano manifestó que ha firmado por dos años porque cree en el proyecto y le ilusiona y se mostró esperanzado con que «juntos» puedan «conseguir los objetivos» y con ser «un jugador importante». A la hora de definirse, coincidió con Braulio en señalar su polivalencia –aunque aclaró que si se tiene que decantar por una posición, prefiere mediocentro– y se considera «un jugador que abarca mucho terreno, con buena salida de balón y golpeo en largo y fuerte en el juego aéreo».
El centrocampista recordó el partido de 2012 ante el Jaén en el que sufrió en los últimos lances un fuerte golpe en la cabeza. El jugador, que tuvo que ser intervenido horas después por la fractura craneal, reconoció estar «totalmente recuperado» y afirmó que el casco lo seguirá utilizando en los partidos «por seguridad». A pesar de la gravedad de la lesión, el jugador se mostró contundente al señalar que «para nada» tiene miedo en las disputas por balones aéreos.
Luismi reconoció que estuvo a punto de venir al Real Valladolid en el último mercado de invierno, pero consideró que «estaba aprendiendo de jugadores de primer nivel» y que no era el momento de salir. «Ahora sí«, sentenció tajante el jugador andaluz.
Braulio: «Esperemos que Mata cumpla las expectativas»
La presentación del jugador andaluz también sirvió para que Braulio hiciera balance de la situación actual de la plantilla. El gallego no quiso contestar sobre rumores de contrataciones. «Ya sabéis que prefiero no hablar de jugadores». Concretamente fue preguntado sobre el central argentino Lucas Aveldaño, quien ha afirmado tener una oferta.
Asímismo, reconoció que la semana que viene se firmarán más jugadores aunque aclaró que «lo importante es que sean buenos los que vengan, más que la fecha». «Es una cuestión de acertar, más que del momento. La plantilla podríamos tenerla cerrada, pero creemos que los jugadores que podríamos tener no reúnen el perfil«, sentenció.
De los tranferibles también habló el director deportivo. «Cada uno sabe su situación». De momento afirma no haber propuestas por ellos. Por su parte, sobre la salida de Manu del Moral dijo que se ha tratado de una «cuestión deportiva«.
Sobre la última incorporación, Jaime Mata, ha declarado que «es un jugador importante. Esperamos que cumpla las expectativas que tenemos generadas en él«. Braulio valora que el delantero haya apostado por este proyecto, «teniendo otras opciones». Finalmente, afirmó que tener a Paco Herrera «es un aliciente a la hora de hablar con jugadores».