Solo cuatro jugadores de la plantilla no supera el 1’75 metros de estatura, hecho que, no obstante, no se nota a balón parado, donde el equipo apenas marca

El Real Valladolid se puede considerar un equipo alto, literalmente. De los once jugadores que jugaron esta semana en Tarragona, solo Moyano, Roger y Nikos no llegan al metro ochenta, aunque se quedan a escasos centímetros. El resto de jugadores que formaron de inicio superan esa marca. La media fue, exactamente, de 183’7 centímetros por jugador. Teniendo en cuenta que la altura media de los hombres españoles es de 174 centímetros, resulta llamativa la altura de los blanquivioleta.
Juanpe, Bruno Varela, Kepa Arrizabalaga, Rennella y Samuel. Estos son los cinco jugadores con más centímetros en la plantilla actual del Real Valladolid. Los dos primeros alcanzan los 1’91 metros, los dos siguientes empatan con 1’88 y Samuel les sigue con un centímetro menos. Con 185 centímetros les siguen Marcelo Silva, Borja Fernández, André Leão, Mojica y Manu del Moral. También entraría en esta lista, el ahora pepinero, Timor.
Curiosamente, los lanzadores más ocurrentes esta temporada, sobre todo para perfiles zurdos, han sido dos David Timor y Vincenzo Rennella. Dos de los jugadores más altos de la plantilla han sido los responsables, en gran numero de ocasiones, de colgar las faltas lejanas y/o laterales de las que ha dispuesto el Pucela.
El caso de Timor podía ser algo más comprensible al tratarse de un mediocentro con cierta capacidad defensiva; en cambio, resulta chocante que Rennella un delantero centro, alto y fuerte, se dedique a colgar balones en este tipo de acciones.
Tanto Gaizka Garitano como Miguel Ángel Portugal, en sus inicios, apostaron por Timor como el lanzador principal de faltas y ahora, con la marcha del centrocampista valenciano, el técnico burgalés ha elegido a Rennella como su sustituto. La pregunta es: ¿Por qué?
La respuesta es complicada. Es verdad que Timor tenía en buen desplazamiento en largo y una gran potencia en su zurda pero el Pucela perdía centímetros dentro del área. Con Rennella, la explicación es más complicada. Sí, tiene potencia y técnica y sus faltas no han ido mal lanzadas pero es el segundo más alto del equipo y, se supone, un especialista en el remate.
El equipo tiene un déficit de zurdos, es verdad, pero los hay. Hermoso, Mojica o el recién llegado Nikos, además del canterano Ángel son los otros ‘siniestros’ del equipo. Hermoso ha tomado la responsabilidad en algún tiro libre, pero ni Karampelas ni Mojica suelen ser los encargados de botar las faltas. El griego parece que está descartado para estas tareas mientras que el colombiano es el encargado, hasta la fecha, de los saques de esquina y de alguna falta esporádica, como la que dio lugar al gol de Silva contra el Córdoba.
Las causas pueden ser varias, pero los datos dicen que el Real Valladolid solo ha marcado un gol en un remate directo tras un saque de esquina y otro tras una falta lateral. En ambos casos, los rematadores, contaron con una buena ayuda de la defensa contraria.
Curiosamente, el único gol que ha marcado el Pucela a raíz de un saque de esquina fue gracias a uno botado por Hermoso, que como se ha dicho anteriormente, apenas viene contando para estos lanzamientos, en parte, claro, porque ha sido relegado a un segundo plano en las últimas jornadas.
Sea como sea, que el Real Valladolid, con una de las plantillas más altas de la competición, solo haya marcado dos goles a balón parado y que en los dos hayan tenido mucho ver los rebotes, es muy preocupante.
Falta de rematadores o falta de estrategia, la llegada de jugadores corpulentos y altos como Rennella o Borja Fernández deberían ser un incentivo más para pulir estas jugadas.