Borja Jiménez, técnico del Promesas, reconoce irse con la sensación de «haber perdido dos puntos» frente a un CD Lealtad que dio por bueno el empate en palabras de su entrenador, Javi Rozada
Después del empate de sus pupilos ante el Lealtad, Borja Jiménez, entrenador del Real Valladolid Promesas, reconoció irse con el sabor amargo de quizá haber perdido dos puntos, toda vez que lo intentaron todo en pos de la victoria y pagaron «el único tiro a puerta» que tuvieron los asturianos.
Puso en valor el empuje de su filial y lamentó el tanto anulado a Caye Quintana, una vez concluido un encuentro «muy condicionado por el clima». «Con aire a favor hemos estado peor que con aire en contra, pero nos hemos sentido ganadores», afirmó, antes de pensar ya en el próximo envite, en Santiago ante el Compostela.
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Mientras tanto, Javi Rozada, entrenador del CD Lealtad, consideró justo el empate debido a la mejor lectura que tuvo su equipo en la primera mitad y a la que expuso el Real Valladolid Promesas durante la segunda. «En la primera mitad les condicionamos a jugar mucho en largo. En la segunda, con la incorporación de Caye, nos metieron atrás», reconoció.
La igualada permite a los asturianos «seguir en la pelea», si bien lamentó Rozada que cuando creían que les iba a beneficiar el aire «no pudieron tener continuidad» debido al aire, que provocó que el partido no tuviera «mucha historia».
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