El ariete, procedente del UCAM Murcia, se convierte en el segundo fichaje del Real Valladolid Promesas en este mercado invernal
Invierno movido en las oficinas del Real Valladolid, al menos en lo que a su filial se refiere. Tras las salidas de Dani Espinar hace casi dos semanas, todavía sin destino confirmado, la cesión de Pelayo al Cristo Atlético y la llegada este lunes del centrocampista Jorge Juliá, tras la desaparición del Huracán Valencia, en la mañana de este jueves se confirmaba otro fichaje, el de Higinio Marín.
El delantero de veintidós años, nacido en Calasparra (Murcia), llega a orillas del Pisuerga tras su paso por el UCAM Murcia, equipo del que procede, y en el que no solo no ha disfrutado de minutos, sino que en quince de veintiún jornadas ha formado parte de los no convocados por Eloy Jiménez.
Tras debutar el quince de octubre de 2012 en Segunda División de la mano del Real Murcia, contra el Mirandés –jugó tres minutos–, dos temporadas después recaló en la Cultural Leonesa, donde tan solo estuvo los meses de preparación de cara a la liga –marcando el único tanto leonés en los partidos de pretemporada– y los dos primeros envites, en los que no fue convocado.
El entrenador culturalista de aquella campaña, Javier Cabello, dijo del murciano que era un jugador «con potencial y joven», y que lo que buscaban era que se pudiese desarrollar sumando minutos para que en un futuro fuera un «jugador interesante», minutos que no iba a tener en la Cultural, por lo que tras previo pago de la entidad leonesa para que saliese, Higinio acabó fichando por La Hoya Lorca.
En el conjunto murciano acabó disputando un total de 1.013 minutos, divididos en veinticuatro partidos, jugando nueve de titular, y acabando el partido tan solo en cinco ocasiones. Marcó tres goles, dos saliendo desde el banquillo y uno estando sobre el terreno de juego desde el inicio, viendo cuatro tarjetas amarillas en los envites disputados.
El verano de 2015 se confirmó su fichaje por el UCAM Murcia, conjunto del que ha formado parte durante veintiún jornadas y en el que tan solo ha disputado 152 minutos: 66 en liga –divididos en cinco partidos– y 86 en Copa del Rey ante Algeciras –marcando el primer gol del equipo– y UD Logroñés.
Así pues, queda cumplido el afán de la dirección deportiva del Real Valladolid de firmar a un delantero para su filial, algo prioritario pese a que el primer fichaje del mercado de invierno fue un centrocampista. Con este refuerzo se pretende aumentar la competitividad en una parcela falta de demasiado gol. Es el segundo, pero no se descarta que haya un tercero, y más después de que haya habido dos salidas, cuando la previsión es que hubiera solo una.