Con la baja por sanción de Rodri, se abre un abanico de posibilidades para ocupar la punta del ataque de cara al partido frente al Lugo. Diego Rubio parte como favorito, aunque Óscar, Alfaro o Juan Villar son otras opciones

Foto: Real Valladolid
El Real Valladolid afrontará el partido del domingo en Lugo con siete bajas significativas. Una de esas es la del delantero Rodri. El atacante nacido en Soria había sido titular en prácticamente todos los encuentros que había disputado el Real Valladolid hasta la fecha, siendo solo suplente frente al Alcorcón y contra el Bilbao Athletic, en las jornadas dos y cuatro.
Para suplir su baja, Miguel Ángel Portugal cuenta en su plantilla con otros dos delanteros centros, Diego Rubio y Erick Moreno, aunque este último está lesionado y estará al menos otras diez semanas en el dique seco. Por tanto, Diego Rubio se perfila como el sustituto ideal en la posición de nueve.
El chileno llegó a Valladolid procedente del Sporting de Portugal el último día de mercado. Desde ese momento, Diego Rubio apenas ha sido noticia en el Pucela ya que tan solo ha disputado 121 minutos repartidos en siete partidos, siempre saliendo desde el banquillo. Sin muchas oportunidades, el ex de Colo-Colo, entre otros, ha esperado con paciencia su momento y ahora, parece que ha llegado.
El propio delantero hizo en este jueves unas declaraciones en las que aseguraba que se encontraba «plenamente integrado en el grupo», a la vez que se mostraba seguro de sí mismo: «Tengo que aprovechar la oportunidad y estar preparado para lo que el míster decida».
Pero el mismo Diego Rubio sabe que, pese a ser el único delantero centro disponible, Miguel Ángel Portugal puede tirar de otros recursos para formar el once del próximo domingo. Jugadores como Juan Villar, Alfaro o incluso Óscar pueden actuar en la posición de nueve.
Juan Villar
El exjugador del Cádiz aterrizó este verano en Pucela con la vitola de ser un extremo con olfato de gol, capaz de poder jugar como punta si fuese necesario y la verdad es que está cumpliendo con las expectativas. Villar está siendo una de las notas más positivas de este Real Valladolid. El onubense es, de momento, el máximo goleador del equipo y uno de los mayores peligros de este Pucela.
Con Garitano ya jugó un par de encuentros como referencia y se desempeñó bien; de hecho, anotó un gol en ambos partidos. De abandonar la banda para pasar a la punta de ataque, su posición podría ser cubierta por Alfaro o, con menos opciones, por Guzmán.
Alejandro Alfaro… u Óscar
De un onubense a otro. Alfaro ha demostrado a lo largo de su carrera que es un jugador muy polivalente, ya que puede desempeñarse en cualquier posición de ataque, pero también ha dejado claro en sus distintas etapas que tiene gol.
El técnico blanquivioleta es consciente de ello y por eso en el partido ante Osasuna decidió sacar del campo a Rodri e introducir a Alfaro para que jugase los últimos minutos como el jugador más adelantado del equipo. El Pucela contaba con un jugador menos sobre el campo y Alfaro no pudo hacer gran cosa, pero en lo poco que hizo demostró llevar peligro.
Óscar González
El ’10’ del Real Valladolid es una opción más de cara a ocupar el centro del ataque blanquivioleta. Para el veterano mediapunta, esa posición no es del todo desconocida ya que, sin ir más lejos, el año pasado disputó unos cuantos partidos como ‘falso nueve’. Cuando Rubi jugaba con 4-3-3, Óscar muchas veces ocupaba la posición central de los tres hombres de arriba.
A esto hay que sumar que el salmantino es un futbolista con una gran visión de juego lo que le hace más fácil encontrar los espacios para marcar gol. Este año solamente ha anotado un gol, pero la temporada pasada llegó a sumar dieciséis tantos, lo que le convirtió en el pichichi del equipo.
Como se ve, ante las bajas, Diego Rubio se ha quedado como único punta, pero las opciones son muchas y variadas –más si se tuviera en cuenta, algo que no parece que vaya a ser el caso, a Caye Quintana, punta del filial–. Portugal tiene en su mano depositar la confianza en Diego Rubio y, quizá descubrir un goleador, o probar con varios inventos y ver si la fortuna está de cara.