Las bajas de los sancionados Marcelo Silva y Samuel obligan a Portugal a hacer remodelaciones en la defensa para el partido del domingo en el Anxo Carro

Miguel Ángel Portugal deberá alinear, una vez más, un nuevo once en Lugo, el sexto en otros tantos partidos al mando. Las múltiples bajas acaecidas durante la temporada le han obligado a experimentar con la reducida plantilla de la que dispone jornada sí, jornada también.
Y es que a los lesionados Erick Moreno, André Leão y Manu del Moral, se les suman, este fin de semana, los sancionados Marcelo Silva –que fue expulsado en el encuentro ante Osasuna–, Samuel y Rodri, –que avistaron la quinta amarilla–.
La preocupación para con la línea defensiva es evidente. Con la ausencia de los centrales titulares, la zaga, ya de por sí corta, se queda en cuadro. Juanpe, que lleva sin jugar de inicio desde la séptima jornada en El Alcoraz, es el único central puro del que dispondrá Portugal.
Se palpa, por tanto, la imperiosa necesidad de reforzar la última línea del plantel en el próximo mercado invernal. Y no solo por su escasez numérica, sino por los cuestionables resultados que esta ha ofrecido en los encuentros disputados.
Se erige, entonces, una gran oportunidad para el central canario, quien esta semana ha asegurado encontrarse «totalmente preparado tanto física como psicológicamente» para disputar el encuentro en el municipio lucense. El enigma recae en el nombre de su acompañante en el centro de la defensa. A priori, quien presenta más papeletas es David Timor, su pareja en Huesca y con quien Juanpe asegura «entenderse muy bien».
Otra posibilidad sería desplazar desde la izquierda a Mario Hermoso que, sancionado, no pudo estar ante Osasuna, aunque en tierras gallegas sí estará disponible. En este supuesto, el canterano Ángel podría repetir convocatoria y sustituir al madrileño, aunque, a juzgar por lo acontecido ante el cuadro rojillo la pasada jornada, quizá sería Chica quien siguiera reemplazando a Hermoso y Moyano transitaría por el carril diestro.
No obstante, esta es una alternativa bastante remota, puesto que, aunque Braulio aseguró en el pasado que el jugador procedente de ‘La Fábrica’ puede ocupar esta demarcación, su inexperiencia en ella no la hace muy viable y, previsiblemente, retornará ocupando el flanco zurdo, si es que vuelve al once.
Una opción dispar, pese a ser bastante descabellada, podría ser la actuación de Javi Chica como central. Aunque en muy pocas ocasiones se le ha visto lejos de la línea de cal, cabe recordar que, tanto en sus orígenes como en el Espanyol, ha ocupado alguna vez este puesto, y no lo hizo nada mal.
En todo caso, si fuera Timor el central improvisado que acompañe a Juanpe, seguirá habiendo dudas hasta el último momento con otras dos piezas del rompecabezas, los laterales, toda vez que Portugal, como se ha comentado, vuelve a contar con los tres de que dispone en su plantilla. Hasta la pasada jornada, cabe recordar, obraron Hermoso y Chica a pie natural. Frente a Osasuna, esto lo hizo Moyano, con Chica por izquierda.
El Promesas, nuevamente desmantelado
Pese a estas permutas en la primera plantilla, Portugal deberá recurrir, como mínimo, a tres jugadores del Promesas. No por gusto –pues desde hace varias temporadas el apostar por la cantera es un recurso fugazmente empleado–, sino por obligación. Y es que desde que arribó a Pucela, el técnico burgalés siempre ha necesitado del filial para ultimar convocatoria. Julio, Ángel, Anuar, Dani Espinar y José han sido los privilegiados requeridos por el durante alguna de las cinco jornadas que lleva comandando el buque blanquivioleta, mas solamente los dos primeros han dispuesto de minutos.
Esta necesidad se traducirá en bajas sensibles para un Promesas que, a día de hoy, milita en los puestos de descenso a Tercera División. El equipo dirigido por Borja Jiménez se ha visto siempre alterado por las múltiples lesiones y sanciones de la primera plantilla, así como por el virus FIFA.
Hasta el miércoles, el canterano Cristian se alzaba como uno los posibles acompañantes de Juanpe en Lugo, pero durante el entrenamiento matutino sufrió un esguince en el ligamento lateral interno de la rodilla izquierda, por lo que estará alrededor de tres semanas de baja. Royo, que junto al central canario realizó la pretemporada con el primer equipo podría debutar en una convocatoria.
En condiciones normales, Iván Casado, quien ya se estrenó en la pasada campaña y que conforma la zaga titular junto a Cristian, estaría un escalón por encima. Sin embargo, la evolución del capitán del Promesas, aquejado de una rotura de fibras abdominal, es todavía una incógnita.
Por tanto, el domingo ante el Lugo, Portugal deberá determinar si cubrir las bajas mediante reubicaciones en el primer plantel o si, por el contrario, dar una oportunidad a los tan olvidados jugadores del Promesas se antoja más factible.