Todos los integrantes de la primera plantilla, excepto el lesionado Marc Valiente, se ejercitaron en el césped del José Zorrilla
Foto: Sergio Sanz
El Real Valladolid ya prepara el duelo de este domingo frente al Deportivo Alavés. El partido, que es intrascendente para ambos conjuntos, servirá para poner a tono a todos los jugadores, así como recuperar las sensaciones perdidas.
Rubi ya avisó el pasado domingo en rueda de prensa que habrá un cambio en el estilo de juego. «Vamos a intentar que el equipo no se comprometa tanto con el juego elaborado; no jugar tanto desde atrás, comentó. El partido, por tanto, será una muestra de un Real Valladolid distinto, más directo.
El técnico catalán no podrá contar con el lesionado Marc Valiente, que no se espera que reaparezca hasta los play-off, ni con el sancionado Lluís Sastre que acumuló su quinta tarjeta amarilla la jornada pasada.
La siguiente sesión de entrenamiento será a puerta abierta el viernes a las diez y media de la mañana.
Túlio, optimista
Túlio de Melo tiene una dilatada trayectoria profesional y es de los pocos jugadores en Segunda División que ha escuchado sobre el césped el himno de la Champions. Por eso, aunque su participación en Valladolid ha sido escasa desde que llegó el pasado mercado invernal, es una voz muy autorizada para juzgar el presente y el futuro blanquivioleta.
«Estamos preparados para afrontar el play-off de ascenso. El destino está en nuestras manos y podemos conseguirlo, tenemos que estar unidos”, explicaba el ariete brasileño, que espera contar con minutos en los últimos partidos de la competición regular.
De Melo, como Roger expresó el día anterior y como todos los jugadores de la plantilla, sueña con marcar el gol del ascenso. «No hay problema con que Roger también lo sueñe, podemos ganar 2-0», bromeó.