La mala racha del Juvenil A del Real Valladolid está perjudicando a la UD Sur y podría hacerlo al equipo B a final de temporada

Desde hace varios meses el Juvenil A del Real Valladolid perdió el tren de la parte alta de la clasificación. A partir de ahí su evolución ha sido negativa. Cada vez más alejado de los puestos de Copa del Rey, el equipo de Chuchi Macón ha acusado en demasía no tener un objetivo en la competición. Todo ello ha hecho que el conjunto blanquivioleta acumule una racha de ocho partidos sin conocer la victoria –tres empates y cinco derrotas–.
Esta fase negativa perjudica a la UD Sur, puesto que sus rivales por la salvación se están beneficiando del Pucela. Y si finalmente se produjera el descenso de los encarnados, la salvación del Juvenil B podría ser más complicada debido al arrastre en Liga Nacional. La División de Honor está en la recta final para su conclusión. Cierto es que el equipo dirigido por Jonathan Prado sigue dependiendo de sí mismo para seguir un año más en la categoría, pero el camino podría haber sido más sencillo si su vecino le hubiera ayudado.
Adarve, Majadahonda, Alcobendas, Alcalá, Alcorcón y Flecha Negra han logrado puntuar en sus recientes enfrentamientos contra el RValladolid. De hecho, solo los dos últimos no pudieron ganar. Todos son rivales directos del Ascensores Zener por la salvación, que este curso parece que no se decidirá hasta el final. Del sexto, con 33 puntos, hacia abajo puede descender cualquiera. Incluso se podría meter al conjunto blanquivioleta, que tiene 37, si no ganara ninguno de los cuatro partidos y se diesen una serie de resultados.
Especulaciones al margen, competir sin un objetivo es complicado. Porque el Real Valladolid no lucha por el descenso, pese a la situación. Ha sido una temporada extraña, que no ha sido bien planificada. Con la plantilla al completo, podría seguir luchando por la Copa del Rey, pero las subidas con el Promesas de varios jugadores, las lesiones y las salidas de Adeva y Maxi han puesto muy difíciles las cosas a Chuchi Macón. El técnico ha intentado seguir con lo que tenía, pero no era sencillo. Además, la moral de sus pupilos se ha visto mermada por la mala racha en la que se encuentran.
Pero esta situación no solo está afectando al propio equipo, sino que también la sufren otros. El que lo hace de forma más directa es la UD Sur, que podría encontrarse en una posición más cómoda si el Real Valladolid hubiera salido victorioso de los enfrentamientos contra los rivales de la zona baja. Pese a ello, el objetivo de los encarnados sigue basándose en los 34 puntos a los que lleva haciendo referencia su entrenador, Jonathan Prado, desde el inicio de la temporada.
Las cuentas son claras para el Ascensores Zener, que alcanzaría esa cifra si ganase los dos partidos que le quedan en casa. Por el Felicísimo pasa la permanencia y la Sur tiene al alcance de su mano continuar una campaña más en División de Honor. En teoría, con esos puntos tendría la salvación casi sellada, pero en el mundo del fútbol todo puede pasar. El conjunto encarnado no puede confiarse y debe pelear al máximo cada uno de los cuatro encuentros que restan. Le falta un último empujón para cerrar su primera temporada en la categoría con un buen aprobado.

El Juvenil B también lo sufre
La temporada en la División de Honor está a punto de terminar y los equipos de Liga Nacional miran su final. Los arrastres de equipos de Castilla y León los podrían sufrir equipos vallisoletanos. El ejemplo más claro es el del Betis, que ahora mismo se encuentra a nueve puntos de la salvación, ya que el Puente Castro ocupa puestos de descenso y bajaría a Regional el cuarto por la cola, la Arandina.
El equipo B del Puente Castro es el colista de Liga Nacional, por lo que el club leonés podría sufrir un doble descenso por deméritos propios. Al igual que el Numancia, que cuenta con representantes en ambas categorías.
De momento, ninguno de los dos equipos se encuentra en la zona roja, pero sí al borde. El de División de Honor, encuadrado en el Grupo II, tiene cinco puntos sobre el infierno, mientras que la diferencia del otro es de siete. Rondan el peligro, aunque se salvarían.
En el caso de que finalmente no fuera así y el A descendiera, también lo haría el quinto por la cola en Liga Nacional –CyD Leonesa, con veintiséis puntos–. Y si ya lo hiciera la UD Sur… Al final terminaría complicando la permanencia del Juvenil B del Real Valladolid –con treinta puntos y un partido por disputar–, que cerraría la cadena comenzada por su primer equipo.
Así las cosas, el Juvenil A podría terminar perjudicando -indirectamente- al B, a la UD Sur y al Betis. Tres equipos vallisoletanos que sufrirían los daños colaterales de una mala temporada del conjunto blanquivioleta. Pero todavía quedan partidos para que todos ellos consigan sus objetivos y continúen otra temporada en sus respectivas categorías.