El técnico del Promesas cree que su equipo pudo sacar algo positivo ante la Cultural Leonesa, rival que está cuajando una gran temporada

El Real Valladolid Promesas quiso pero no pudo. Fue fiel al estilo que le viene caracterizando esta temporada, algo digno de agradecer, pero cayó derrotado en el Reino de León.
«Si no competimos así no tendríamos la puntuación que tenemos«, explicó. «Ni estaríamos donde estamos», agregó. Y eso es lo que en su opinión no deben abandonar nunca, jueguen en el estadio que jueguen.
El técnico gallego cree que sus pupilos fueron superiores en el partido pero que es precisamente, en esos campos, donde el futbolista tiene que crecer. Sin embargo, no le fue suficiente. «Tienes que hacer más cosas de las que nosotros hacemos para ganar un partido a un rival como la Cultural Leonesa», de la que además explicó que le parece un gran equipo que está haciendo una buena temporada.
El Promesas, por su parte, también está consiguiendo grandes resultados en su vuelta a la Segunda División B. «Al final, tienes que dar un paso al frente y diferenciarte porque a la postre los que se distinguen son los que están arriba y el resto jugarán por otra serie de objetivos».
El filial pucelano terminó pagando las concesiones, algo que para De la Barrera igual contra otros equipos no harías, pero que ante rivales así, lo pagas seguro. Quizás la falta de pegada por esa ausencia de referentes arriba puede ser un problema aunque para el entrenador, el equipo se tiene que adaptar a ello y «encontrar soluciones» dentro de los jugadores de los que disponen.
Tendrá que hacerlo, más si cabe, con la lesión de Guille Andrés que a priori parece que no llega a rotura aunque se esperará a conocer el diagnóstico y el alcance de la lesión. Pagó también la expulsión de Ayub, una nueva en lo que va de temporada. «Sabíamos que estos lances podían ocurrir y desafortunadamente ocurrió». Para el técnico, fue fruto de la presión y las ganas de hacerlo bien.
De nuevo Alexis le ganó la partida a Iván en el once titular, cambio que a pesar de que el equipo pierde contundencia y juego aéreo, gana perfil en partidos en los que buscan estar más cerrados y que la pelota llegue a los hombres de arriba.
Sin embargo, el técnico lanzó un aviso. «Aquí no hay nadie indiscutible, la gente entra y sale», confirmó, «el momento de Iván llegará». Otro de los cambios llamativos fue el debut de Jose tras su larga lesión, quien le dio al Promesas anchura y permitió conectar con los laterales. «En definitiva, generar espacios donde creíamos que había ventajas».