Cerca del ecuador de la competición, a falta de un futbolista que tire del carro en la parcela goleadora, el Pucela apoya sus esperanzas de ascenso en convertirse en un bloque sólido y contundente en la defensa de su área

Foto: Real Valladolid
En aspectos generales, la zaga del Real Valladolid ha dejado más sensaciones positivas que negativas, a la vez, que los números hablan bien de los defensores pucelanos. El conjunto blanquivioleta es el segundo equipo que menos goles ha recibido de la categoría, catorce en los dieciocho encuentros disputados, únicamente superado por el invicto Sporting, que acumula doce dianas encajadas.
El nivel de la línea defensiva tiene cosas mejorables, no tanto en términos tácticos, técnicos o físicos, pero sí en lo que se refiere al tema mental, la concentración, el estar metido en el partido, los noventa minutos.
La mayoría de los goles que el equipo ha recibido –y recibe– han llegado –y llegan– en situaciones de desconexión, la zaga se pone en off y las vergüenzas quedan al aire. Son los momentos en los que la defensa pucelana muestra sus carencias y los que el rival suele aprovechar para hincarnos el diente.
Una defensa muy bien surtida de centrales pero más bien pobre en los costados. Lo habitual es vernos con Chica-Rueda-Valiente-Peña, pero cuando Samuel y Chus han tenido que ser titulares su rendimiento se ha visto más que correcto.
Existen dos versiones en la línea de cuatro del Real Valladolid, una más elegante, más fina, más de Plaza Coca cuando juegan Rueda y Valiente. Se nota que el balón sale desde atrás con más limpieza y el juego del equipo deslumbra más. La otra, más ruda, menos fotogénica de cara a la galería, más de la planta baja de Bagur. No se complica nunca y Óscar suele tener más problemas de cuello esos días.
El uno por uno
La posición del dos tiene dueño. Javi Chica uno de los futbolistas que mejor está rindiendo en esta temporada 2014/ 15. Es jugador de Primera División y no se le caen los anillos por dejarse la piel cada fin de semana en los campos de Segunda. Sorpresa más que agradable, quizás su conexión anterior con Rubi haya tenido mucho que ver con esto. No le asusta asomarse al área contraria y aunque pueda parecer lo contrario tiene un físico espectacular que le permite estar los noventa minutos corriendo la banda.
En el caso de Valiente, se puede decir que no hemos visto todavía al mejor Marc en lo que llevamos de temporada. Las lesiones han lastrado su continuidad y se ha perdido seis partidos este curso. A poco que mejore su nivel físico debe convertirse en la pieza clave que siempre ha sido para este equipo desde que llegó en el año 2010. Ya ha cumplido, en este primer tramo del curso, el primer ciclo de amonestaciones.

Cuando ha faltado su habitual pareja de baile, Jesús Rueda, que ha sido en cinco partidos, el equipo se ha resentido demasiado. Es un futbolista fundamental en el once, a pesar de que tampoco hemos logrado ver aún su mejor versión. Su calidad a la hora de sacar el balón jugado desde atrás define el estilo del equipo y el 85% de precisión en los pases de toda la temporada lo corrobora. Le hizo un buen gol de libre directo al Tenerife y solamente ha realizado doce faltas en toda la liga.
En el lateral zurdo, Carlos Peña ha jugado en los dieciocho partidos que se llevan disputados. Solo en Leganés salió desde la banqueta. No ha hecho goles, pero si ha dejado más de una bonita asistencia desde la banda izquierda. El charro se ha entendido a las mil maravillas con Mojica desde que el colombiano diera el salto al extremo titular de los blanquivioletas. De todos modos, la grada sigue queriendo un poquito más de nuestro carrilero zurdo para lo que resta de campaña, aunque, sin hacer ruido, y como acostumbra, su nivel da, cuanto menos, como para valorarlo con un aprobado.
Cuando Chus Herrero, uno de los secundarios, tenido que jugar, ha cumplido correctamente. Fijo en los partidos de Copa del Rey, las lesiones de Rueda y Valiente le dieron paso en el once en liga. Tardó en recibir su primer gol el equipo con él en el once y se fajó en Anduva o en Sabadell en partidos complicados dejando la puerta a cero. Cuando el míster ha querido dar descanso a Chica también ha sido un lateral derecho aseado.
Samuel Llorca es el zaguero que menos minutos ha disputado, con solo 580. Es un central distinto a Marc y Jesús. Rápido en el corte, se ha notado su veteranía y su experiencia en la categoría. Muy contundente en el ámbito áereo, ha sido capaz de lograr dos tantos en las dos primeras rondas de la Copa del Rey. Ha demostrado ser un recambio de garantías para los supuestos titulares.