El Real Valladolid es el mejor clasificado de los tres descendidos a Segunda División hasta el momento
El Pisuerga baja revuelto, aunque cierto es que las aguas han vuelto a su cauce tras la ajustada victoria frente al Recreativo de Huelva. Más certero aún es apuntar que el caudal se observa más turbio en el Río Arga y en el Guadalquivir en lo que sus equipos de plata se refiere. Y es que, tanto Betis como Osasuna deben estar más preocupados que el Real Valladolid por su devenir en lo que va de temporada, sobre todo en el caso pamplonica.
Mientras que un últimamente denostado Real Valladolid navega cuarto en la clasificación, el Real Betis, equipo que partía con la vitola de favorito al ascenso, se encuentra por detrás justo del equipo blanquivioleta, quinto con veintisiete puntos. Si bien, tanto a pucelanos como a sevillanos les gustaría encontrarse en posiciones de ascenso directo a estas alturas de temporada, para nada han perdido dicho tren, que en el caso del Valladolid se encuentra a tres puntos tan solo.
Caso diferente es el de Osasuna. El conjunto rojillo, que por historia, aunque no tanto por plantel, debería estar luchando por colarse lo más arriba posible, se encuentra, a día de hoy, en puestos de descenso, en una temible decimonovena posición, con tan solo dieciséis puntos, la mitad que el invicto Sporting de Gijón, equipo que marca la ya mencionada zona de ascenso directo. Lejos, muy lejos se encuentra Osasuna de ahí.
Los problemas extradeportivos de la entidad pamplonica han hecho mella, sin duda, en una plantilla confeccionada a base de remiendos, de llamadas de última hora como la del iraní Nekounam, de chavales como Merino, o de inventos como el colocar a Sisi de lateral izquierdo.
Si vital debe ofrecerse el encuentro para el Real Valladolid, no digamos para Osasuna. Los dos, también necesitados de gol, ya que el conjunto de Jan Urban solo ha marcado un gol más que el de Rubi, se enfrentarán en un partido con sabor a Primera División. Sabor en El Sadar, campo que tampoco parece el mismo de temporadas atrás, y en el que en circunstancias como las que acontecerán el domingo a las doce, nada bueno se podría esperar para los intereses vallisoletanos. Sin embargo, la película ha cambiado.
Tanto ha cambiado, que es Osasuna, no lo olvidemos, quien más de cerca ve un precipicio al que el Real Betis se ha asomado con mayor cercanía que el Real Valladolid. En definitiva, hasta ahora, de los que el año pasaban deambulaban por la élite, somos los que mejor lo estamos haciendo, y como diría Joan Laporta: “Al loro, que no estamos tan mal”.
