El primer juvenil rojillo ya tiene cerrada la plantilla con la que debutará este sábado a la una del mediodía en el Grupo V de la División de Honor contra el Real Valladolid
Viernes, uno de agosto de 2014. Treinta y dos futbolistas comenzaban a entrenar en el Felicísimo de la Fuente a las órdenes de Jonathan Prado y Chemi Beltrán. El objetivo de todos ellos era el de ganarse una plaza en la plantilla y poder presumir de competir en la misma categoría que el Real Madrid, Rayo Vallecano o Real Valladolid, entre otros. Precisamente este último será su primer rival en la competición.
Para afrontar el primer partido con tres puntos de por medio, el equipo lleva trabajando durante todo el mes con alta intensidad y ha disputado hasta diez partidos amistosos, contra equipos de todo tipo de categorías. Cinco victorias, dos empates y tres derrotas es el balance de pretemporada. Lo mejor de cada partido, la carga de trabajo acumulada en los integrantes de la plantilla y una continua sensación de mejora. Nada tiene que ver el primer partido que jugó la Sur como condición de equipo de División de Honor ante el Villa de Simancas de Tercera División –que ganó por dos a uno– con el partido de presentación frente al Numancia de su misma categoría.
Haber doblegado a los dos equipos de Tercera División de Valladolid dice mucho del potencial de este equipo, sin embargo, no dejan de ser partidos amistosos. Además, la pretemporada nos deja un dato interesante, y es que la UD Sur no ha perdido aún en su feudo. El equipo y el cuerpo técnico saben de la importancia de hacerse fuertes en casa para conseguir así la permanencia y alargar este bendito sueño del que el modesto equipo del barrio de La Rubia no quiere despertar.
Hasta siete jugadores –Alberto, Merino, Centeno, Tapia, Bueno, Caminero y Oli– permanecen del plantel que el año pasado logró la gesta. Ellos serán los encargados de mantener a este equipo despierto en la División de Honor y evitar las pesadillas del descenso de tan bonita categoría.
A los siete veteranos, se suman quince incorporaciones. Unos, de equipos inferiores de la UD Sur; otros, de diversos clubes de Valladolid: Laguna, Betis, Real Valladolid y, por último, fichajes de jugadores foráneos que por motivos académicos se desplazan a nuestra ciudad. Comenzaremos analizando el equipo, línea por línea para que conozcan un poco mejor a los encargados de llevar el nombre del fútbol base vallisoletano por toda la geografía española.
La portería
La portería está cubierta por Alberto y por Rubo. Alberto fue uno de los porteros que consiguieron el ascenso el año pasado. Es un viejo conocido de las categorías inferiores del Real Valladolid, ya que hasta el año pasado defendía los colores blanquivioletas. El año pasado, junto a Borja, formó la dupla de guardametas de un equipo capaz de dominar con autoridad la Liga Nacional de juveniles. Aún es de segundo año, pero luchará con el palentino Rubo por la titularidad este año.
Rubén, más conocido como Rubo, procede del Club Internacional de la Amistad de Palencia. Doce temporadas en el equipo palentino referencia en el fútbol base le avalan. Es bueno comenzar la casa por los cimientos, y una buena dupla en la portería es importante para mantener la categoría. Se espera una bonita y sana lucha entre ambos porteros con el objetivo de mantener la portería a cero en cada partido.
La defensa
Es la línea del equipo que mayores incorporaciones ha sufrido. La zaga del año pasado era de calidad y, sobre todo, veteranía –todos de último año–, con jugadores como Iván López, Iván Diez, Álvaro, Raúl Herruzo… El único superviviente del equipo de la temporada pasada es el lateral Merino. Esta será su cuarta temporada como jugador rojillo y está llamado, desde su carril, a ser uno de los hombres importantes en defensa.
El que debe dar un paso adelante en su jugo y ser el káiser de la defensa es Marcos Fernández Isla. El central procede del Liga Nacional del Real Valladolid y ya en la presentación del equipo contra el Numancia hizo las veces de capitán.
Su compañero de fatigas en el centro de la defensa podría ser bien Rober o bien Víctor. El primero, presente en convocatorias territoriales de Castilla y León en los últimos años sabe lo que es competir a máximo nivel. Procedente del Betis CF, aún es juvenil de segundo año pero está preparado para el reto. Por su parte, Víctor, procedente del Laguna, es un central de último año capaz de aportar su experiencia en momentos que el equipo pueda necesitar más veteranía que juventud.
El comodín en defensa es el jugador de Megeces, Daniel Manso. Asciende del Juvenil Regional de la UD Sur tras cuatro años en el Betis CF. Tras la baja de Erich, podría ser el encargado del lateral acompañando a Merino en el otro lateral. Cierra la zaga David González, aunque en principio está previsto que se ejerza con el Juvenil B, su nombre puede sonar en este equipo si Jonathan Prado lo considera necesario.
El medio del campo
En el medio del campo la UD Sur cuenta con hombres importantes con respecto del año pasado. Javi Bueno y Jorge Tapia. El primero ha jugado como rojillo desde categoría Prebenjamín y debe dar un paso adelante este año (otro más). Tapia tampoco debe quedarse atrás y puede adaptarse a la posición de central, esta será su cuarta temporada en el club y ambos deben tirar del carro en la medular. No lo tendrán nada fácil. Las incorporaciones son de gran calidad y con experiencia: Antón, Pesca y Fer Sastre lucharán por la titularidad.
Antón procede de la cantera del Zamora CF, y el año pasado fue importante en el equipo de Juvenil Regional. Raúl Pescador, Pesca, llega del Levante, tras una vida en el fútbol base charro repartida entre el Santa Marta y el Helmántico. Será otro de los llamados a marcar las diferencias. Por último, Fer Sastre, arriba desde el Betis CF, al igual que Rober, y comienza una segunda etapa en la UD Sur. Esperando su oportunidad desde el Juvenil B estará Maxi, aunque hay que tenerle en cuenta ya que en la presentación contra el Numancia fue titular, por lo que no se descarta una alta participación del jugador juvenil de primer año.
Además la dinamita de los del barrio de La Rubia también se concentra en las bandas. Dos de sus jugadores más importantes del año pasado como Oli y Centeno buscarán dar continuidad a su buena temporada en Liga Nacional. Tendrán, junto a ellos, a hombres de mucha calidad como Juanillo, que, además, en pretemporada se ha destapado como goleador con dos tantos. El madrileño Caminero, veterano del año pasado, también luchará por disponer de oportunidades al igual que Gabi.
Gabi es un jugador venezolano que vive en la Residencia de Jóvenes Jugadores del Real Valladolid y que intentará plasmar en el campo su experiencia de haber jugado trece temporadas en su país. De esa experiencia puede presumir Sarabia, que ya conoce la División de Honor de juveniles tras haber jugado el año pasado en el CD Cervantes. Su paso por las categorías inferiores también le sirve como un gran aval.
Los delanteros
Encontramos tres perfiles diferentes de delanteros, por lo que las alternativas que dispone Jonathan Prado son bastante variadas. Procedente del CD Laguna llega Juan. Inconfundible con sus dos metros de altura, este espigado delantero puede ser el desatascador ideal y el encargado de recibir balones aéreos y en largo, debido a su envergadura. Además, se ha destapado como el pichichi de la pretemporada con cuatro goles, por lo que está llamado a ser uno de los goleadores del equipo.
Otro hombre con gran capacidad goleadora es Marcos Martín. El canterano del Real Valladolid recala en el equipo rojillo para demostrar sus capacidades ofensivas como referencia en el ataque o como hombre de banda dónde ya dispuso de minutos el año pasado.
El tercer jugador en discordia es un hombre de la casa, que cumplirá su octava temporada como jugador de la Sur. David López, que también ha marcado en pretemporada por lo que puede estar ante la oportunidad de crecer para este juvenil de segundo año.
El cuerpo técnico
Todos estos jugadores serán dirigidos por un cuerpo técnico a la altura del proyecto. Jonathan Prado, graduado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, es un enamorado de la pelota que demuestra su pasión en cada encuentro–el curso pasado llegó a compatibilizar el banquillo del Liga Nacional y del Cadete Regional–. Precisamente esa es la filosofía que mantuvo el año pasad; un «partido a partido» que comienza este sábado y que esperamos seguir contando durante muchos años.
Su mano derecha será Chemi Beltrán, que cumple ya tres años con el Juvenil A de la UD Sur. Tres años formando un tándem técnico con Jonathan Prado que permite a los demás clubes tener envidia sana por el buen hacer durante estas campañas. Además, Santos García será el encargado de trabajar con los porteros, cumpliendo su quinta temporada desarrollando esta función.
Completan el cuerpo técnico, Edu Prieto, ligado al Sur desde 2004 y que desarrollará la función de delegado del club; y dos antiguos jugadores del conjunto de La Rubia que pasan a ver el fútbol desde el otro lado. Dani Martín y Cristian Ampudia –que logró el ascenso el año pasado– serán ayudantes del cuerpo técnico y echaran una mano en lo que sea posible.
