El nuevo director deportivo fue presentado en sociedad, dos meses después de empezar a trabajar para el Real Valladolid

No por conocido dejó Braulio de ser esperado. O, dicho de otro modo, no porque se supiera que llevaba desde abril trabajando para el Real Valladolid su primera comparecencia ante los medios de comunicación fue menos aguardada. Más bien al contrario. En la zona noble de Zorrilla había ganas de reverberar su voz hacia el exterior; sus opiniones y planes.
Con dilatada experiencia en el campo, se le puede considerar un hombre técnico, más si cabe teniendo en cuenta su parquedad en palabras. No es una persona de medios, sino de despachos. Pero no por ello dejaba de ser necesario escucharle, como responsable primero de la parcela deportiva, que mueve el engranaje del club y la pasión de la afición.
Explicó, en primer lugar, que estos dos meses le sirvieron «para conocer la entidad por dentro», tiempo que, a su vez, empleó en «intentar sumar dentro de mis posibilidades para conseguir el objetivo de la permanencia», que finalmente no se consiguió, aunque ‘chocara’ a priori, su presencia con la de la dirección deportiva saliente.
Carlos Suárez justificó esta convivencia alegando que «había que respetar una estructura que había empezado una temporada y que debía acabarla» y con una metáfora: «Los buenos pintores, antes de enmarcar los lienzos, dan un paso atrás para ver si el cuadro les ha quedado bien. Braulio ha tenido estos dos meses para dar ese paso atrás, para ver, desde la independencia, cómo se hacen las cosas aquí».
Efectivamente, el gallego dio un paso atrás, y luego otro hacia adelante, cumpliendo con su intención y cometido de ser el nuevo director deportivo del Real Valladolid, rechazando otras ofertas. «Uno tiene que ir allí donde realmente le quieren, y este club apostó por mí de manera muy clara», explicó con rotundidad cuando fue preguntado por esta cuestión, la misma con la que relató que la coexistencia con Alberto Marcos y su equipo fue «sana» y el motivo por el cual no contará con nadie de ese equipo para el suyo.
«Tengo mi propio grupo de trabajo, de plena confianza. Algunos están trabajando en otras entidades, pero que se cierre no solo depende de eso. No nos marcamos fechas para ese cierre», afirmó, algo que confirmó el presidente. «En su momento se informará, ahora hemos creído que no era conveniente. Con el cuerpo técnico sucederá más o menos lo mismo».