La zaga del filial blanquivioleta es la menos goleada del Grupo VIII de Tercera División y una de las grandes bazas para lograr el ansiado ascenso a Segunda División B
Para que una casa sea sólida, fuerte y resista todas las embestidas, debe empezar a construirse por los cimientos. Pues bien, esta misma idea puede trasladarse al mundo del fútbol. La defensa de un equipo es fundamental para que este salga adelante y se consigan los objetivos marcados a principio de temporada. Ruba, Xavi Carmona, Iván Casado, Fran No, Jorge Pesca, Adrián y Juanmi son los ejes que sostienen al Real Valladolid Promesas.
Que la defensa del filial blanquivioleta sea la menos goleada –tan solo ha encajado treinta tantos– no es casualidad. El gran acierto a la hora de fichar a Xavi Carmona, Juanmi y Adrián, junto a la madurez deportiva adquirida por Ruba, Iván Casado, Fran No y Jorge Pesca, han contribuido a que la solidez defensiva haya sido una de las grandes bazas del Promesas esta campaña.
El primer gran acierto en la defensa se produjo con los fichajes. Tras las salidas en verano, la zaga blanquivioleta quedó muy mermada, pero las llegadas de Xavi Carmona, Adrián y Juanmi han sido todo un acierto.
El lateral derecho catalán ha demostrado ser uno de los fichajes más rentables. Indiscutible desde inicio de temporada, ha dejado patente sobre el terreno de juego su válida para ser algo más que un jugador de Tercera División. Un jugador defensivo que no ha dudado en sumarse a las labores ofensivas y contribuir con asistencias y un par de goles.
Dos lesiones y algunas sanciones han obligado a Xavi Carmona a dejar su puesto a Ruba. El arandino, extremo reconvertido en lateral la temporada pasada, no es uno de los fijos para Torres Gómez, pero cumplió como el que más cuando se le presentó la oportunidad de ser titular.
Adrián comenzó la temporada de manera titubeante, sin terminar de convencer a Torres Gómez. Con el paso de las jornadas, debido a las sanciones y las lesiones, tuvo su oportunidad. Un jugador polivalente que ha contribuido a la solidez defensiva, sobre todo desde el lateral izquierdo. Es en esta posición donde más ha rendido el madrileño.
Si las incorporaciones de Xavi Carmona, Adrián y Juanmi al filial blanquivioleta han sido de gran acierto, la vuelta de Fran No al once, tras superar su grave lesión –esta se produjo en el último partido de la temporada pasada ante el Real Ávila–, ha sido clave para que la zaga pucelana sea una de las menos goleadas.
El central andaluz ha experimentado un gran crecimiento, si lo comparamos con la temporada pasada. Su seguridad –controlada y medida–, confianza y experiencia en la categoría le han servido para ser uno de los indiscutibles de Javi Torres y un seguro de vida para el equipo. A Fran No hay que unirle a Iván Casado y Jorge Pesca. Los dos centrales, que se han ido alternado el puesto vacante tras la vuelta del ex bético, han sabido entenderse a la perfección con su compañero.
El aporte de estos dos jugadores ha sido decisivo a la hora de consolidar la defensa. Iván es un seguro por alto –tanto en la faceta defensiva como en la ofensiva, en la que ha conseguido anotar tres goles–, y va bien al cruce. También se muestra atento a la hora de hacer las coberturas con el lateral derecho, cuando este sube la banda.
Pesca, gracias a su pasado como mediocentro, da salida al balón y no duda en sumarse al ataque cuando puede. Incluso, el arandino tiene la anécdota de aquel partido ante el Becerril en la que acabó jugando como portero.
A todos estos jugadores hay que sumarle la aportación de Teto en ciertos momentos de este tramo final de temporada. El extremo, su demarcación natural, no ha tenido inconveniente en retrasar su posición para ayudar al equipo cuando Torres Gómez así se lo ha requerido.
A pesar de no ser su sitio natural, Teto ha demostrado cualidades para ser un buen lateral izquierdo. Su velocidad y descaro han contribuido a que el Promesas tenga mayor salida de balón jugado desde atrás. También ha dado un plus en ataque, llegando desde la línea defensiva.
Ahora llega el momento de la verdad. El próximo domingo, a partir de las doce del mediodía, comienza la pugna por el último objetivo del Promesas: el ascenso a Segunda División B. Conseguir un resultado positivo sería muy importante. Aquí es donde la zaga blanquivioleta volverá a jugar un papel clave. Ruba, Xavi Carmona, Iván Casado, Fran No, Jorge Pesca, Adrián y Juanmi tendrán que demostrar, una vez más, por qué los pilares fundamentales en este equipo.