El mediapunta salmantino no pudo ejercitarse con el resto de sus compañeros en Medina del Campo; continúa recuperándose de su esguince

Hasta Medina del Campo se ha trasladado la primera plantilla del Real Valladolid para entrenar. Los Campos Anexos siguen estando impracticables para un equipo profesional de Primera División. Esta situación ha generado cierto malestar dentro del cuerpo técnico y ha conllevado que varios de los entrenamientos se hayan tenido que realizar en varias localidades de la provincia de Valladolid, como por ejemplo en Íscar, Laguna de Duero y esta mañana en Medina del Campo.
La parte positiva de esta situación es que el equipo se ha acercado hasta los aficionados de la provincia que habitualmente no pueden desplazarse hasta la Avenida Mundial 82 a ver los entrenamientos. La acogida por parte de estos aficionados ha sido muy buena.
También, ha servido para que se estrechen relaciones con dichos aficionados y con los clubes propietarios de los campos de entrenamiento que han ofrecido todo tipo de facilidades al club presidido por Carlos Suárez.
En el entrenamiento de esta mañana se ha ejercitado toda la plantilla, a excepción de Osorio y Óscar. El caso del jugador de Santa Marta es el que ahora más preocupa a Juan Ignacio Martínez. Sufre un esguince de grado uno y su participación en el partido del domingo frente al Elche está en el aire. No obstante, todavía quedan dos sesiones para que el jugador pueda recuperarse ya que se encuentra en manos de los fisioterapeutas del club.
Mañana viernes, a partir de las once de la mañana y en el Estadio José Zorrilla, el equipo entrenará a puerta cerrada. Después del mismo, Juan Ignacio Martínez ofrecerá la habitual rueda de prensa semanal.