El extremo de veintiséis años regresa a la liga española con el Real Valladolid tras un irregular paso por la lusa
Con tan solo un año, Jeffrén llegó con su familia a la Isla de Tenerife, lugar donde comenzó su carrera deportiva. Su inicios como futbolistas se fraguaron en las categorías de la Club Deportivo Tenerife, hasta que en 2004 fichó por unas de las canteras más potentes del fútbol europeo, la del Fútbol Club Barcelona.
Llegó para jugar en el Juvenil B, donde pronto empezó a destacar entre sus compañeros. No pasó mucho tiempo para que Jeffrén pasara a jugar en el filial del Barça, forjándose como un jugador conocido por su raza en Tercera División y en Segunda B.
En la temporada 2006/07 logró el ascenso a la División de Bronce, cuajando un gran año, en el que disputó veintiséis partidos –además de los cuatro del play-off– y anotó seis tantos. Su periplo por Segunda División B tampoco fue malo. El Barça B se quedó a un punto de poder luchar por el ascenso a la categoría de plata. Jeffrén sumó 1.520 minutos en veinte encuentros, y cinco goles.
Guardiola fue el entrenador que le dio la oportunidad de entrar en el primer equipo. Entrenador y jugador coincidieron en el filial y el catalán conocía bien el talento del extremo hispano-venezolano. Le llamó para realizar la pretemporada en verano de 2008, donde jugó y marcó goles. Al finalizar el stage veraniego, Jeffrén regresó al segundo equipo.
Su debut en Primera División llegó a finales de aquella temporada, el diecisiete de mayo de 2009, en el ONO Estadi y ante el Mallorca, cuando el Barça ya se había proclamado campeón de Liga. Su (relativa) consolidación con el primer equipo del Fútbol Club Barcelona llegó a la temporada siguiente. Debutó en Champions y marcó sus primeros goles en la máxima categoría del fútbol español.
Vestido de azulgrana, Jeffrén ganó tres campeonatos de Liga, dos supercopas de España, una Supercopa de Europa, una Champions y el Mundial de Clubes de 2011. Anotó tres goles en veintidós partidos repartidos en tres temporadas, incluyendo un tanto en el ‘Clásico’ contra el Real Madrid, en la ‘manita’ del veintinueve de noviembre de 2010.
Irregular paso por Portugal
Jeffrén llegó al conjunto portugués en verano de 2008 como una gran promesa. El Sporting Clube de Portugal pagó casi cuatro millones de euros por él y le firmó un contrato por cinco temporadas, hasta 2016, en el que figuraba una cláusula de rescisión de treinta millones, lo que, todo unido, suponía una franca apuesta.
No obstante, en su primera temporada en el conjunto luso pasó desapercibido. Una inoportuna lesión le impidió tener continuidad y tan solo pudo participar en dieciocho encuentros. En su segundo año en la entidad leonina tampoco gozó de mucha confianza, aunque jugó un poco más, veintiún partidos.
En la actualidad, no contaba para su técnico, Leonardo Jardim, ni era del buen gusto de su presidente, Bruno de Carvalho, toda vez que su llegada a Lisboa había sido fruto de los despilfarros del anterior, Godinho Lopes.
Pese a su juventud, puede decirse que su llegada al Sporting coincidió con su declive futbolístico, que, a su vez, estuvo ligado a la sucesión de lesiones que ha padecido, y por las cuales tan solo se le ha visto defender el escudo leonino en 929 minutos en la Liga Zon Sagres, pertenecientes a veinticuatro partidos, en los que, sin embargo, anotó cinco tantos.
Internacional con la sub 21
A pesar de ser tentado en varias ocaisones por la selección de Venezuela, su país natal, Jeffrén prefirió defender los colores de España, donde se ha criado. En 2006 el seleccionador venezolano, Richard Páez, lo citó para disputar la Copa America 2007, ofrecimiento que el jugador rechazó.
Jeffrén ha vestido los colores patrios en varias de las selecciones de las categorías inferiores españolas. Así, logró proclamarse campeón de Europa con la sub 19, en 2006, y su mayor hito, el Europeo sub 21 de 2011.