Granada no es solo el escenario donde el Real Valladolid disputará su partido este viernes, además conformó el más preciado anhelo de José Zorrilla
Ningún poema del romanticismo español fue anunciado con tanto vuelo de campanas como el titulado ‘Granada’, de José Zorrilla, la obra con la que el vallisoletano soñaba desde su juventud, y cuya composición fue la principal ocupación de su vida desde 1845 hasta 1852. El poema ‘Granada’ está inconcluso y dista mucho de ser la obra maestra del autor; pero, no obstante, es el poema orientalista largo más importante que ha producido el romanticismo español, y su influencia en la literatura de la segunda mitad del siglo XIX fue de gran alcance. Zorrilla lo consideraba como su empresa poética de más envergadura y se mostró siempre extraordinariamente susceptible respecto a esta obra.
Fue también este poema el escudo con el que el ilustre escritor pretendía defenderse de las acusaciones de su padre, quien por entonces, y pese a la fama de su hijo, se creía un desgraciado por tener un hijo dedicado a las letras. La redención, obviamente, fue entregada a Zorrilla con el paso de los años, de sus lecturas, y de, entre otra multitud de reconocimientos, el que el estadio de fútbol de su ciudad tomara su nombre.
En estas, llegamos al partido que este viernes enfrentará al Real Valladolid y al Granada en la ciudad nazarí. Los paralelismos entre aquel Zorrilla de mediados del siglo XIX y el actual Real Valladolid son más que notorios. Si, por entonces, era José Zorrilla quien arribaba a Granada en busca de la consecución de un poema que lastrara todas las acusaciones que se vertían sobre que era un poeta de improvisación y descuidado, en enero de 2014 es el equipo blanquivioleta el que busca refutar todas las opiniones que le estigmatizan como un equipo sin un juego claro, capaz de lo mejor y lo peor, y que en cada nuevo partido, en cada nueva situación, presenta una nueva facha.
La leyenda del rey Al-Hamar
El asunto del poema ‘Granada’ propiamente dicho es la conquista del reino moro de Granada por los Reyes Católicos, pero tiene una introducción que presenta la naciente gloria de la dinastía nazarita, la «Leyenda de Muhamad Al-Hamar el Nazarita, rey de Granada». La sintonía entre esta historia y la actualidad continúa siendo fascinante, ya que, al leer la vida de este primer rey del Reino de Granada, puede reflejarse ante nuestros propios ojos la figura de Gino Pozzo, o de su padre, Giampaolo Pozzo, actual dueño de Granada, que de la nada ha creado un equipo de élite dentro del fútbol español, tal como hiciera con la ciudad nazarí o con la zona palaciega de La Alhambra el rey Al-Hamar.
En el nombre de Aláh clemente y sumo
Que dá sombra á la noche, luz al dia,
Voz á las aves y á las yerbas zumo:
Cuya suprema voluntad podria
Tornar de un soplo el universo en humo,
Y que atesora en mí su poesía,
Escrita os doy para su eterna gloria
Del principe Al-hamar la régia historia.
Así comenzaba José Zorrilla el libro primero, ‘Libros de los sueños’, de la Leyenda del rey Al-hamar, en su poema épico ‘Granada’, cantando las glorias de uno de los más grandes gobernantes de una ciudad a la que dedicó demasiado esfuerzo para la recompensa que obtuvo.
Este viernes, a partir de las nueve de la noche, podremos vivir un capítulo más de la gloriosa historia de Gino Pozzo, rey de Granada, o la venganza de José Zorrilla, quien, sin duda alguna, se verá honrado por las huestes vallisoletanas si estas consiguen un triunfo. La vendetta de una ciudad contra el nombre de una homónima cuyo nominativo trajo tantos quebraderos de cabeza a uno de sus ciudadanos más ilustres, la venganza de José Zorrilla.