Omar Ramos se vuelve a ver con sus compañeros en una sesión bastante táctica para los jugadores.
Dos novedades centraron la doble sesión de entrenamiento de este viernes del Real Valladolid. Por un lado la mala noticia, Bergdich y Guerra no pudieron entrenarse con normalidad. Por otra, la vuelta a casa de Omar Ramos. El jugador canario, que reconoció estar «muy contento» con la posibilidad de volver a jugar «donde quería», firmó su acuerdo definitivo por la entidad blanquivioleta y se pudo ejercitar con el resto de sus compañeros, aunque extraoficialmente llevase desde varios días atrás en el gimnasio.
El entrenamiento matutino fue programado tuvo como cuestione más destacadas los conceptos tácticos de presión y salida de presión. La nota negativa fue el pisotón en el empeine izquierdo de Zakarya Bergdich. El lateral, que ya arrastraba dolores en jornadas atrás, es duda para el partido de este sábado contra el Promesas.
Por la tarde el entrenamiento transcurrió sin mayor novedad, salvo en lo tocante a Guerra, que no lo pudo completar debido a unas molestias. Mañana sábado la plantilla reanudará los entrenamientos con un partido contra el Real Valladolid Promesas a partir de las nueve y media con entrada libre para todos los aficionados en los Campos Anexos al Nuevo José Zorrilla.