Desde su llegada en el mercado invernal al Real Valladolid, Daniel Larsson ha ocupado ya todos los frentes del ataque, y siempre dando un buen rendimiento.
Cuando el Real Valladolid pensó en reforzarse en el mercado invernal tuvo muy claro qué perfil de jugador pretendía: bueno, bonito y barato. Entonces llegó Daniel Larsson (Gotemburgo, veinticinco de enero de 1987), jugador que cumplía a la perfección estos requisitos y que con el paso del –escaso- tiempo ha sabido adaptarse al esquema de juego que propone Miroslav Djukic en varias posiciones del ataque blanquivioleta.
Hasta el momento el sueco está siendo uno de los fichajes invernales más rentables de toda la Liga BBVA. Llegó a coste cero y su polivalencia está permitiendo que el ataque blanquivioleta cuente con más variantes, y más si se tiene en cuenta la corta plantilla con la que trabaja el técnico serbio del Real Valladolid.
Delantero centro, extremo derecho o izquierdo y mediapunta. Éstas son las posiciones que puede ocupar Larsson en el ataque y en las que ya se le ha podido ver. Todo el frente del ataque, vaya. Y, actúe donde actúe, presenta un sobresaliente desborde y una velocidad endiablada que le permite dejar a sus defensores atrás para plantarse en las inmediaciones del área rival en un abrir y cerrar de ojos.
A sus veintiséis años, el internacional sueco no solo destaca por su potencia, desborde y velocidad, sino también por su olfato goleador, aunque en Valladolid, todavía, la suerte no le ha sonreído de cara al gol. En sus dos primeros años en el Malmö, Larsson anotó veinte goles, además de dar otros doce.
Gracias a estos números el atacante sueco fue pretendido por varios equipos españoles. El Real Betis Balompié fue el más sonado, pero las altas pretensiones económicas del equipo sueco hicieron que Larsson continuará una temporada más –la última que tenia firmada- en el Malmö.
Daniel Larsson comenzó su carrera en 2004 en el conjunto sueco BK Häcken donde su buen hacer (doce goles y seis asistencias) hizo que el Malmö, equipo desde el que recaló en Valladolid, se fijara en él y finalmente se hiciera con sus servicios en 2009.