La defensa del Real Valladolid vuelve a estar en cuadro tras la lesión de Marc Valiente y las respectivas sanciones de Henrique Sereno y Toni Rukavina.
Otra vez con la zaga en cuadro, y ya van dos. Así es como está la defensa del Real Valladolid para recibir el próximo domingo al Atlético de Madrid del Cholo Simeone tras la lesión de Marc Valiente ante el Athletic de Bilbao y las respectivas sanciones que recibirán Henrique Sereno, que vio la quinta amarilla en el partido ante el Betis, y Antonio Rukavina, que fue expulsado en el mismo encuentro.
Es seguro que Djukic no podrá contar con el central portugués Henrique Sereno por lo que la zaga blanquivioleta solo cuenta con un central puro, Jesús Rueda. Carlos Peña sería el sustituto ideal siempre y cuando el Comité de Competición le retire la segunda amarilla a Rukavina y éste pueda estar a las órdenes del técnico serbio.
De no ser así, Miroslav Djukic tendrá que hacer cábalas para tener una defensa el próximo domingo, y esta vez no tiene a Víctor Pérez para usarlo de comodín y ponerlo de lateral derecho. Lo más lógico es que tire de cantera que, dicho sea de paso, para algo está.
Jorge Pesca e Iván Casado son los que más posibilidades tienen de ir convocados, puesto que ya saben que es eso. El mediocentro arandino, al que Djukic está intentando reconvertir en central, a priori es el que más papeletas tiene para completar la lista, si bien el central palentino ya le ganó la partida en el partido de Reyes ante el Celta de Vigo.
Ambos jugadores son fijos en los esquemas de Javi Torres Gómez en el filial y son de los que más minutos han disputado. Casado suele desenvolverse en el centro de la zaga, excepcionalmente y debido a contratiempos también ha ocupado el lateral derecho, pero con Jorge Pesca la cosa cambia. Su posición natural es la de centrocampista, pero ante las bajas que sufrió la defensa del Promesas actuó como central, posición en la que cumple, pero en la que no despliega todo su potencial.
Para el problema del centro de la zaga hay soluciones más o menos solventes. El problema llega con la banda derecha, si finalmente Rukavina tiene que cumplir sanción. Si todos los centrales estuvieran disponibles, la solución sería sencilla: Balenziaga, lateral derecho y Carlos Peña, lateral izquierdo. Pero éste no es el caso del Pucela.
Si miramos hacia abajo encontramos a Guilherme, lateral izquierdo y otro de los fijos del Promesas. El jovencísimo brasileño suele entrenar con el primer equipo y hasta fue llamado para el amistoso que el Real Valladolid disputó en Medina de Rioseco, aunque no jugó. Jugador rápido, potente y que le gusta irse arriba cuando tiene el balón en los pies, y con buena técnica.
Otra bala en la recámara es Rubén Peña. El extremo abulense podría ocupar también el lateral derecho si fuese necesario. Esa posición no es desconocida para el jugador porque en el filial ya ha jugado en esa demarcación y, de hecho, con el primer plantel, con el que suele ejercitarse, ha ensayado alguna vez ahí.
Hasta el sábado, cuando Miroslav Djukic facilite la lista de convocados, no se sabrá si alguno de estos tres canteranos se sentará en el banquillo. No obstante, dada la coyuntura, parece seguro que alguno irá, y éste podría ser el partido en el que bien Pesca o Casado podrían debutar con el primer equipo en Primera División.
