El extremo kosovar procede del Örebro sueco y firmará hasta el treinta de junio.
Miroslav Djukic ya tiene un nuevo soldado. Como él, balcánico. Kosovar, para más seña. Aunque el nombre hecho oficial provoque hilaridad por el inevitable recuerdo añejo a un colombiano con melena de león, es real. Valdet Rama, de veinticinco años, llega procedente del Örebro sueco, uno de los equipos que consumaron el descenso en la última Allsvenska, máxima categoría del fútbol escandinavo.
Ha jugado en el conjunto de la región histórica de Närke las dos últimas temporadas. En la primera sumó más de dos mil minutos repartidos en veintinueve encuentros, en los que hizo ocho goles, mientras que la pasada campaña anotó tan solo dos en veintiún partidos, en los que estuvo en el campo algo más de mil minutos. Antes, vistió las camisetas de varios equipos alemanes -cuya nacionalidad también ostenta-, del Wolfsburgo, en cuya cantera se formó, del Ingolstadt y más recientemente del Hannover, desde donde partió a Suecia tras no contar con minutos deseados en el primer equipo en ninguna de las dos temporadas que militó en el club de la Baja Sajonia.
Tras rescindir su contrato con el Örebro, con el que se encontraba preparando la nueva temporada, pasará hoy mismo reconocimiento médico, estampará la pertinente firma que le convertirá en jugador blanquivioleta hasta el próximo treinta de junio y será presentado.
Dada la cercanía con respecto al próximo encuentro y el hecho de que la primera plantilla se ejercita hoy por última vez esta semana, será el próximo martes cuando empiece a trabajar como nuevo jugador del Real Valladolid, una condición que por contrato podría prorrogarse más allá de verano en caso de que su rendimiento sea el esperado.
El centrocampista albano-kosovar es un jugador ambidiestro que viene a reforzar la posición más demandada por Miroslav Djukic, la de extremo. Si bien es el derecho el más demandado y necesitado, dadas las continuas lesiones de Patrick Ebert, será un complemento no solo para esa zona, sino también para la banda siniestra, donde ha venido jugando en Suecia en los últimos tiempos, tal y como ha reconocido el Real Valladolid en el anuncio en el que hizo oficial su fichaje.
Desconocido para el gran público, cualquiera que eche un vistazo a los vídeos de sus hightlights que pueden encontrarse por la Red, verá en él un jugador capaz de abarcar toda la zona de tres cuartos, habilidoso en el regate, que apura la línea de fondo y con unos cambios de ritmo peligrosísimos para las defensas rivales, dada su potencia de aceleración de gran zancada.
Además, aunque escasa, tiene experiencia en la élite (quince partidos en la Bundesliga en dos temporadas), es goleador y posee buen disparo de media distancia, características que traen a la memoria -a pesar de que uno de esos vídeos con sus mejores momentos habla de ‘The Kosovan Ronaldo’– a un Nauzet Alemán con una mayor destreza en el costado zurdo y que se asemeja en la conducción y aceleración al marroquí del Queens Park Rangers inglés Adel Taatabt.
Llega a Valladolid de la mano de la misma empresa de representación y captación que trajo a Daniel Larsson, OML Sports, en cuyo informe se presenta a Valdet Rama como un jugador rápido y vertical cuando aparece en banda derecha «que destaca por la velocidad de ejecución y su regate» y con dribbling interior acostado sobre la izquierda, donde sus diagonales buscan «acabar con una asistencia o un remate fuera del área».
Con todo, aun teniendo en cuenta cuál es la obligación de esta empresa y cualquier otra, vender su producto, a la espera de que Miroslav Djukic o Alberto Marcos hablen de sus cualidades o el propio jugador las presente en sociedad, las últimas líneas que le dedica el breve informe de OML Sports, a vuelapluma, parecen hablar de unas características anheladas en cualquier extremo, pero que pueden haber sido decisivas en la llegada de Rama a Valladolid: «Es desequilibrante, tiene velocidad, cambio de ritmo, aceleración y excelente golpeo y uno contra uno».