El Getafe, a pesar de sufrir bajas de cierta importancia, cuenta con una plantilla con buen nivel.
El fútbol en Getafe ha crecido de forma meteórica en estos últimos años, a pesar del poco apoyo de la grada a sus jugadores, también causado por los precios abusivos de las entradas en el Coliseum.
La llegada de Ángel Torres a la presidencia y una gestión ejemplar (es de los pocos clubes que no han aplazado nóminas a sus empleados, pese a que no hay ni rastro del fondo de inversión que se iba a hacer cargo de la entidad) han colocado al club azulón en un estatus en el que no son claros aspirantes al descenso y si un posible ‘outsider’ para entrar en Europa.
A base de cesiones, especialmente del Real Madrid, y fichajes de buen rendimiento el club azulón ha desplegado un fútbol más contundente que vistoso, siempre utilizando mucho las bandas y los centros con jugadores como Mario Cotelo, Pernía, Gavilán o Diego Castro y con rematadores del tipo de Pachón, Miku o Soldado.
El estilo sigue esas directrices y de ahí la llegada de Álvaro Vázquez, Alcácer, Lafita o Pedro León, que vuelve a ser propiedad de los getafenses. Las incorporaciones han sido buenas, pero las bajas también son de renombre, como Cata Díaz o Miku, aunque el venezolano se va como cedido al Celtic.
Abraham y Alexis, del que ha sido ejercida su opción de compra, cubrirán la baja del central argentino; mientras que Paco Alcácer, y en especial Álvaro Vázquez, cubrirán la del ariete. También han abandonado la disciplina madrileña Casquero, Ustari, Rubén Pérez, Masilela o Pedro Ríos.
En la portería cuentan con un arquero con experiencia como Moyá y un suplente de calidad como Codina. En defensa han recogido retales de equipos grandes como Alexis, Valera o Miguel Torres unidos a futbolistas de clubes más modestos como Mané, Lopo, Abraham o Rafa.
En el medio aúnan veteranía con juventud, creación con destrucción. En esa zona juegan Sarabia, Xavi Torres, Lacen, Juan Rodríguez, Míchel y Borja. La línea de mediapuntas es lo más vistoso de este equipo: Gavilán, Pedro León, Barrada, Diego Castro, Colunga y Lafita.
Arriba tienen auténtica dinamita con Güiza (que no cuenta para Luis García), Álvaro Vázquez y Paco Alcácer, incluso Colunga también puede jugar como referente. Este es el cóctel que ha preparado Ángel Torres con intención de volver a probar las mieles europeas. O por lo menos, para no salvarse con los apuros de las últimas temporadas.
Tres tenores
Ángel Lafita (Zaragoza, 1984). Ha llegado libre procedente del Zaragoza, a donde volvió con polémica y para convertirse definitivamente en un jugador que, por el momento, no ha sido. La zancada y la pegada del aragonés seguro que serán bien vistas por la grada del Coliseum.
Deportivo y Zaragoza han disfrutado de su buen fútbol y de sus goles. No tanto como los que prometía, pero tampoco más de lo que, como mínimo, se espera de él el Getafe. Seguramente forme parte habitualmente de la gran línea de mediapuntas que posee el club madrileño junto a Pedro León, Diego Castro y Barrada. Pero debe andarse con ojo: sobra uno.
Diego Castro (Pontevedra, 1982). Tras unos primeros partidos de adaptación la pasada campaña, el pontevedrés debe tomar las riendas del equipo y ser uno de los estandartes azulones.
La velocidad, el desborde, sus buenos centros y el gol son la carta de presentación del hijo de ‘El Nécora’, Fernando Castro Santos. Ya demostró su enorme valía en el Sporting donde fue el hombre a seguir de los asturianos, algo que debe suceder este año en Getafe. Si en Gijón fue capitán, en el sur de Madrid, de momento sin brazalete, no debe ser menos sobre el césped.
Abdel Barrada (Provins, Francia, 1989). El joven marroquí fue la gran revelación del club azulón la temporada pasada y la gran apuesta de su técnico, Luis García Plaza. Tras disputar los Juegos Olímpicos con Marruecos llega a Getafe afianzado en el primer equipo, después de tener ficha del filial durante la pasada temporada.
Este año debe ser el de su consolidación en el once titular, donde deberá de dar aún más muestras de su valía con su llegada y su visión de juego. Si destaca, como los dos jugadores anteriores y el exblanquivioleta Pedro León, lo hará la generalidad del equipo.
Fichaje estrella
Álvaro Vázquez (Barcelona, 1991). Se espera que éste sea uno de los jugadores claves este año. El joven delantero procedente del Espanyol, que costó cinco millones de euros, llega como uno de los grandes fichajes del mercado veraniego.
Tiene velocidad, gol y oportunismo, algo que se adecúa a la perfección al estilo del Coliseum. Internacional con la sub 21 española, ha logrado llegar a la cifra de diez goles con la camiseta del Espanyol a una edad más temprana que el mítico Raúl Tamudo, algo que habla muy bien de la calidad y la precocidad de este futbolista.
El míster: Luis García
Luís García Plaza afronta su segunda temporada en el banquillo del Coliseum. En el Levante hizo las delicias del público con un juego más efectivo que bonito, más pr los mimbres con los que contaba que por su propia apuesta, y logró una holgada salvación.
Tras ello, recaló en la ciudad madrileña donde el año pasado logro la permanencia sin apuros finales, aunque a lo largo del año su equipo fue más irregular de lo que le habría gustado. Esta campaña buscará algo más, y plantilla para ello tiene.
Entradas y salidas
Altas: Alcácer (Valencia), Moyá (Valencia), Alexis (Sevilla), Pedro León (R. Madrid), Lafita (Zaragoza), Abraham (Basilea), Xavi Torres (Levante), Colunga (Sporting), Borja Fernández (Deportivo), Álvaro Vázquez (Espanyol).
Bajas: Rubén Pérez (Betis), Masilela (Maccabi Haifa), Pedro Ríos (Levante), Arizmendi (Mallorca), Cata Díaz (Atlético), Alex Pérez (Huesca), Ustari (Boca Juniors), Mosquera (Castilla), Casquero (Almería).