En los partidos ante Recreativo y Betis ha quedado demostrado lo que de verdad puede ser el Real Valladolid. Un equipo que sabe pelear, sufrir y trabajar para sacar los tres puntos, incluso ante un rival tan directo por el ascenso como los de Pepe Mel.
No es algo nuevo esta temporada. A estas alturas nadie se acuerda, pero semejante manera de jugar ya la habíamos observado en los primeros partidos de este año. Cómo olvidar aquellas palizas a Recreativo (sí, sí, en la ida les ganamos 4-0) o a Villarreal B.
Aunque hiciera tiempo que no lo viéramos, esto ya lo habíamos vivido. Lo cierto es que hace cosa de un mes era implanteable pensar que los blanquivioletas pudieran derrotar a los de Pepe Mel. Hace cosa de un mes era imposible ganar -incluso marcar- fuera de casa. Hace cosa de un mes… simplemente ya no creíamos en llegar siquiera a los puestos de play off.
El equipo está desde hace dos partidos en un subidón que no podemos dejar pasar tan rápido. Tenemos la suerte de jugar otro encuentro más en casa tras ganar al Betis, y debemos aprovecharlo para lograr la tercera victoria consecutiva.
Para ello, ¿qué mejor que el apoyo unánime de la afición este sábado en Zorrilla? Siempre se ha dicho que un equipo es su afición, y es por ahí por dónde deben empezar a llegar las fuerzas a los jugadores blanquivioletas.
Si ellos, que ya se encontrarán para el sábado con un espaldarazo de moral importante por haber ganado dos partidos seguidos, sienten el aliento de la grada desde el primer momento, es mucho más fácil que salgan a morder y a comerse al Elche.
Por ello debemos ser los aficionados los que llevemos al equipo a por la tercera victoria. El estadio José Zorrilla debe ser el que lo dé el primer paso para conseguir el número tres.
Por cierto, mención aparte al partido de Nauzet y Barragán ante el Betis en la banda derecha. Me gustaron especialmente, y dieron un auténtico recital tanto de ataque como de defensa. Una compenetración con un punto de velocidad por su costado que hacía tiempo que no se veía en el césped del estadio blanquivioleta.
No sé si simplemente aprendieron a asociarse en el encuentro ante los andaluces, pero si siguen así pueden darnos muchas alegrías y poner en serios aprietos a Abel a la hora de tener que escoger entre Pedro López y Barragán en el once inicial.